Los contenedores están conectados a una farola y la chapuza estuvo a punto de costar una desgracia
15 nov 2007 . Actualizado a las 11:51 h.El motor de los contenedores subterráneos de Baiona está conectado a una farola de alumbrado público que cuando se enciende hace que el sistema no funcione.
Fue la solución más económica que se adoptó en su momento porque llevar los cables hasta el cuadro eléctrico implicaba picar el pavimento para trazar la canalización subterránea.
Esta chapuza ha estado a punto de ocasionar una desgracia entre los trabajadores del servicio de limpieza, según denunció ayer el sindicato Comisiones Obreras.
El sistema eléctrico falló hace diez días cuando los operarios se disponían a vaciar los contenedores de cartón. Accedieron al interior del habitáculo y pudieron escapar antes de que la tapa del contenedor se cerrara de manera inesperada sobre ellos. De lo contrario, hubieran sido aplastados entre los restos para el reciclaje, según denunció ayer el representante de negociación colectiva de CCOO, Castor Fernández Soto.
La empresa de mantenimiento inspeccionó el mecanismo y detectó vibraciones de corriente eléctrica en el subsuelo. Elaboraron un informe en el que advertía al Concello de los riesgos para los trabajadores y propusieron unas obras de arreglo con un presupuesto estimado de 4.450 euros. Al mismo tiempo, señalaron en dicha comunicación, que una vez informadas de las irregularidades, no se hacían responsables de los daños que podrían producirse.
Informe
Comisiones Obreras denunció ayer que desde la concejalía de Vías y Obras, bajo la responsabilidad del edil Manuel Vilar, se ocultó este informe a los trabajadores. Y durante este tiempo los operarios volvieron a sufrir otros dos percances similares que, afortunadamente, sólo quedaron en sustos.
El sindicato también tomará medidas por la decisión por la destitución del encargado de limpieza, que también sufrió un percance y se negó a redactar un informe sobre lo ocurrido fuera de su jornada laboral.