La empresa, fundada en el 2020 en el sur de Lugo, ya factura por encima de los 5 millones y aunque ha recibido propuestas para comprarla, el propietario dice que «no se hizo para vender»
Esta tecnología que abrió la espita a la democratización del internet rápido se extinguirá en España, pero aún hay casi medio millón de abonados que dependen de ella para tener conexión