«No tenemos miedo a los gigantes de la ficción, intentamos hacerlo mejor»

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

TELEVISIÓN

Álvaro Ballesteros

Cree que el modelo actual de televisión desaparecerá y se impondrá el uso de diferentes pantallas para ver vídeo

23 sep 2016 . Actualizado a las 07:31 h.

La televisión tiene futuro, pero tiene que reinventarse. Es la opinión de Tone Kunst, la directora de la NRK, la radiotelevisión pública de Noruega en la región de Norland, que ha revolucionado los contenidos con el concepto slow tv, que retransmite, por ejemplo, el parto de unos corderos o un maratón de calceta. Su directora, Tone Kunst, ha estado en la CRTVG para explicar qué es lo que están haciendo. 

-¿Es hora de superar o reinventar el modelo de la radiotelevisión pública?

-La radiotelevisión pública es importante, pero sí es cierto que llegamos a través de la televisión tradicional a una audiencia de más edad y que no llegamos a la audiencia más joven del mismo modo. Ahora mismo creemos que lo más importante es lo on -line y móvil, y tenemos que contar historias de otra manera, tener tu propia manera de contarlo. Hacemos contenidos diferentes para cada plataforma. 

-¿Internet está matando a la televisión?

-El modelo de televisión tal y como lo conocemos creo que sí va a desaparecer. Pero veremos vídeo en nuevas pantallas. Está pasando ahora, usamos las grandes pantallas para ver fútbol o ficción, y las pequeñas para los clips o las noticias. Será diferente, pero no creo que nada esté matando a nada.

-En línea son plataformas de gran éxito como Netflix. ¿Cómo es la relación con estas nuevas formas de acceder a contenidos?

-En la NRK estamos siendo capaces de competir a nivel mundial. Tenemos Netflix, tenemos YouTube, tenemos todas las nuevas plataformas a través de las que acceden a lo que quieren. Los contenidos, como Lilyhammer, Okkupert, e incluso la slow tv y tenemos la capacidad de distribuirlo primero y luego son las plataformas las que lo emiten. Tenemos una relación de entendimiento. 

-Han conseguido competir con gigantes de la producción de ficción como HBO. ¿Es posible convivir?

-Tenemos que intentar hacer series mejores de las que hacen ellos, y no tenemos miedo a los gigantes. Si se hacen buenos productos la gente va a querer seguir viéndolo. Con eso podemos hacer frente a cualquier operador.

-¿Es la ficción, y en especial las series, una apuesta para retener a la audiencia más joven?

-Las muy buenas series, las que compiten a nivel mundial, son una forma de atraer a los jóvenes en cualquier tipo de pantalla. También tenemos unas webserie Skam [vergüenza] con jóvenes de Oslo, que además tiene un componente educativo porque salen situaciones de su vida. Pero como servicio público, pero nuestra misión es mucho más: es periodismo de investigación, son primicias, y también programas y series.

-La BBC es un referente mundial en servicio público.

-La consideramos la hermana mayor y nosotros somos la pequeña [ríe]. Pero el escenario de los medios está cambiando enormemente y es para todos. También la BBC tiene que entenderse con Netflix.

-Aquí está abierto el debate sobre la politización de las televisiones públicas. ¿Ocurre también en Noruega?

-La verdad es que no. Los políticos no se inmiscuyen en la independencia de los medios públicos, está completamente asumido. El director general se escoge por seis años y da igual quién esté en el gobierno, no cambian a las personas cuando llegan al poder.

-Durante la crisis también se puso en duda el modelo de televisiones autonómicas. ¿Sobran las televisiones regionales?

-Es muy importante tener radios y televisiones regionales para la democracia, y porque estamos cerca de los telespectadores y de lo que ocurre en su entorno. Creo que cada región debería tener su televisión.