Ecologistas en Acción destaca la ría de O Burgo como ejemplo de contaminación

EFE

SOCIEDAD

Los vertidos al mar de las aguas residuales se ha convertido en el principal problema de degradación del litoral español, no solo en el mediterráneo, sino también en el norte de España.

28 jun 2011 . Actualizado a las 22:03 h.

El aumento en un 7% de los vertidos al mar de las aguas residuales se ha convertido en el principal problema de degradación del litoral español, según un informe publicado hoy por Ecologistas en Acción, que apunta que la ría de O Burgo es uno de los casos más significativos. El documento señala la mala calidad de las aguas de baño en España y apunta que en la ría gallega los ayuntamientos de Cambre, A Coruña, Culleredo y Oleiros vierten directamente sus aguas residuales al mar sin depurar.

En el informe «Banderas negras 2011: esto es una barbaridad» el grupo ecologista denuncia la mala planificación del sistema de depuración del 90% de los municipios costeros españoles, que no tienen en cuenta el desequilibrio existente entre la población residente y la población estival. Según el coordinador de medio ambiente de Ecologistas en Acción, Jorge Sáez, en verano se produce un «gran aumento de vertidos orgánicos al mar por la saturación de las depuradoras que no están preparadas para ese volumen de población, solo para salvar los planes urbanísticos de cada zona». «Seguimos realizando vertidos al mar y no reutilizando sus aguas, un panorama desolador que solo busca beneficios a corto plazo», lamentó Saéz.

La organización ecologista resalta también entre «los peores casos de urbanismo» los de los municipios de Fisterra, Barreiros y el borde costero de Vigo. El documento critica «el proceso de mediterranización del norte de España» en alusión a zonas costeras de Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi que aspiran a «imitar» el «desfasado e impactante modelo de la Costa del Sol». Según Ecologistas en Acción, ha habido un «crecimiento urbanístico desmesurado en el litoral de Fisterra, en la Costa da Morte, tras la promoción de la zona que supuso su presencia en los medios a propósito de la marea negra» derivada del hundimiento del petrolero «Prestige».

«En un solo año se llegaron a otorgar mas de mil licencias para nuevas viviendas. Parte de las licencias son ilegales», puntualiza el documento. Añade que «entre 2004 y 2007 la construcción en Fisterra aumentó un 444%, mientras la población residente en el municipio descendía de 5.093 a 4.971 habitantes en el mismo periodo». Ecologistas en Acción indica que el anterior Gobierno de la Xunta, de la coalición PSdeG-BNG, «ante la negativa del Concello a anularlas de oficio, impugnó las licencias para edificar 400 viviendas junto a las playas de Sardiñeiro y Langosteira».