La elección de María Blasco cierra dos años de interinidad en el CNIO

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Sustituye a Mariano Barbacid, que continuará investigando en el centro

23 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Después de dos años de interinidad, el Centro Nacional de Oncología (CNIO), la joya de la corona de la investigación en España, tiene nuevo director. La investigadora María Blasco, directora del programa de Oncología Molecular y vicedirectora de Investigación Básica del centro, será la sustituta de Mariano Barbacid tras ser aceptada su candidatura por unanimidad en la reunión que mantuvo ayer el patronato del CNIO. De esta forma se pone fin a un largo y tumultuoso proceso, en especial en su última etapa, que coincidió con la guerra abierta entre Barbacid y el Ministerio de Ciencia a cuenta de la fórmula empresarial propuesta por el científico para financiar el desarrollo de un nuevo fármaco anticáncer, proyecto que rechazó la abogacía del Estado en medio de un cruce de acusaciones que traspasó fronteras.

Blasco, a juicio del patronato, cumple con los requisitos de «excelencia investigadora, proyección internacional y capacidad de liderazgo». Los científicos consultados por La Voz tampoco dudan de la excelencia de María Blasco. «En España, mellores que ela non a ían a atopar, e ten unha gran proxección mundial», apunta Xosé R. Bustelo, vicedirector del Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca. «É unha persoa que ten unha gran calidade científica. A decisión paréceme acertada», corrobora el investigador en cáncer de la USC Anxo Vidal. Pero lo que sí se discute es el proceso seguido, que ha dañado la imagen del CNIO, con reiteradas filtraciones de los candidatos, cambios en la decisión final y disputas abiertas a la luz de la comunidad científica internacional. «Parece que querían espantar aos candidatos. Isto hai que facelo en silencio», señala Bustelo.

Filtraciones

Antes de la reunión de mayo pasado, en la que en un principio se iba a tomar una decisión que luego se aplazó, incluso se llegó a filtrar una lista inicial de diez candidatos que había buscado una empresa de cazatalentos, en la que María Blasco ocupaba la novena plaza. Luego se hizo una criba final con cuatro aspirantes, entre los que figuraba Blasco, junto con otro científico del CNIO, Erwin Wagner, y dos reputados oncólogos de Cambridge, Carlos Caldas, y Harvard, Paolo Pandolfini. Barbacid expresó sus preferencias por este último, y criticó la escasa experiencia en gestión de Blasco. Los dos expertos internacionales acabaron por retirarse.

Este había sido el segundo intento, ya que la primera convocatoria, lanzada en septiembre del 2010, tampoco tuvo éxito tras la selección final de dos candidatos. Mientras tanto, Barbacid, que seguirá trabajando como investigador en el CNIO, según confirmaron fuentes próximas a su persona, continuaba en la dirección.