La mitad de los alemanes dejan de consumir pepinos y tomates

berlín / agencias

SOCIEDAD

Francia detecta tres casos sospechosos que vincula a la bacteria «E. coli»

29 may 2011 . Actualizado a las 10:38 h.

La alarma por el brote infeccioso causado por la bacteria E. coli se ha extendido por toda Alemania y, según informaciones que adelantaba ayer el dominical Bild am Sonntag, más de la mitad de la población ha dejado de consumir tomates, lechugas y pepinos. Un 58% hacen caso así a la advertencia del Instituto Robert Koch, el principal organismo epidemiológico alemán, mientras que el 41% siguen ingiriendo esos alimentos, pero con precaución.

Los grandes productores del país, asustados por las pérdidas millonarias que el foco bacteriano les puede causar, se han lanzado a la ofensiva y están realizando pruebas en sus productos para poder venderlos con el letrero de «libre de EHEC», en referencia a la Escherichia coli enterohemorrágica.

La federación de agricultores y productores en Bonn acusó además a España de poca disposición para ayudar a esclarecer el foco y a sus autoridades de ocuparse solamente de librarse de la culpa, a pesar de que muestras de pepinos de las explotaciones andaluzas sospechosos ya están siendo analizadas en el Laboratorio de Referencia de E. coli de la Universidade de Santiago.

En Francia, los ministerios de Economía, Agricultura y Sanidad informaron ayer de que investigan tres casos que podrían estar relacionados con la E. coli. «Actualmente hay en Francia tres casos sospechosos en proceso de investigación, vinculados con la epidemia alemana, pero en ningún caso se ha identificado un vínculo con el lote (de pepinos) retirados en Francia», informaron dichos ministerios en un comunicado común. Un lote de verduras sospechosas había sido entregado en el país vecino, fue retirado inmediatamente de la circulación.

«Las primeras investigaciones llevadas a cabo por las autoridades alemanas y relativas al origen alimentario de esa epidemia señalan a unos pepinos importados de España», recuerda el comunicado. Francia ha reforzado el «dispositivo de vigilancia» y las autoridades han avisado a los «profesionales de la salud».

Críticas desde Francia

Por su parte, los productores galos, que temen que se produzca una «amalgama» entre los vegetales de origen español y francés, señalaron en un comunicado que «las condiciones de la producción francesa no tienen nada que ver con las practicadas en España, tanto desde el punto de vista medioambiental como social».

Mientras, el número de víctimas mortales por el síndrome urémico hemolítico (SUH), que provoca la infección causada por la E. coli, asciende ya a diez personas, todas en Alemania. Las autoridades sanitarias germanas destacaron que aún no se ha alcanzado el punto álgido de la infección, que esperan que tenga lugar en los próximos días, por lo que instaron a la ciudadanía, especialmente en el norte del país, a extremar las medidas de higiene. La portavoz del Ministerio de Agricultura, Holger Eichele, consideró «probable» que siga el aumento el número de casos hasta que no se identifique «sin lugar a dudas la fuente» del brote.