HP financia la iniciativa de «cloud computing» de un colegio rural
12 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.A finales de esta semana, y para celebrar el día del libro, los alumnos de primaria del colegio rural agrupado de Boqueixón y Vedra (A Coruña) les leerán un cuento a los de infantil. Pero lo harán a través de una videoconferencia en siete escuelas unitarias. Esta es una de las múltiples aplicaciones del proyecto Comunidades rurales virtuales para la educación en la nube, que desarrolla el Centro de Supercomputación de Galicia en un colegio rural gallego y que le ha valido para convertirse en una de las tres únicas iniciativas en el mundo elegidas por Hewlett-Packard para financiar su proyecto piloto.
Los otros dos galardonados fueron una universidad de Idaho y otra de Taiwán. Hewlett-Packard otorgó 50.000 dólares para este proyecto que permite utilizar recursos y nuevas tecnologías desde la Red, sin necesidad de llenar el disco duro, el correo electrónico o sin tener que llevar una memoria USB. El conselleiro de Educación, Jesús Vázquez, adelantó ya que su departamento estudia la posibilidad de integrar en el proyecto Abalar esta iniciativa, aunque no se fijaron plazos ni un número de centros educativos.
El proyecto de cloud computing se desarrolla en un colegio rural agrupado al que acuden 74 niños de educación infantil y 17 de primaria. La directora, Iolanda Neira, agradeció la implicación de todos en él, pero sobre todo la de «nosos locos baixiños, que ás veces nos levan a facer este tipo de loucuras, e que agardemos que non sexa a última».
Uno de los responsables de Hewlett-Packard en España, Enrique Solbes, señalaba que se presentaron un número importante de iniciativas a este concurso de la división de I+D de HP en Palo Alto (California), y que solo tres fueron seleccionados para ser financiados.
Además de incrementar las tecnologías en el aula -ahora mismo cada una de ellas cuenta con tres portátiles y cuatro o cinco equipos de mesa-, la directora del centro recordaba las ventajas de un proyecto que permite que los pequeños tengan un escritorio virtual propio y que los docentes especialistas lleven a cabo sesiones conjuntas para niños separados entre sí por kilómetros de distancia.