«La inversión I+D+i es una cuestión de supervivencia»

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

SOCIEDAD

La ministra preside mañana en Vigo la botadura del «Ramón Margalef»

21 feb 2011 . Actualizado a las 00:09 h.

Cristina Garmendia (San Sebastián, 1962), que preside mañana en Vigo la botadura del buque oceanográfico Ramón Margalef, hace un balance de la situación de la investigación y la innovación en España. Más de la mitad de los españoles no la conocen, según el CIS, pero no lo considera relevante, porque estima que lo importante es que los ciudadanos estén tomando cada vez más conciencia de que las políticas de I+D+i son viales para su bienestar, como demuestran las encuestas, ya que el 77% consideran que deben excluirse del ajuste presupuestario.

-El jueves Joan Guinovart, presidente de la Confederación de Sociedades Científicas de España (Cosce) aseguró que este año la ciencia «entra en un período de malnutrición y enfermedad» por la falta de recursos. ¿Ha habido una marcha atrás?

-No tengo más que palabras de reconocimiento al profesor Joan Guinovart, que ha dicho que la crisis afecta a todos. Es la primera vez que se lo escucho. Este ministerio, que aglutina las principales competencias en I+D+i, ha quedado excluido del plan de austeridad, que conlleva una reducción de gastos del 12% de media en los demás y del 15% en la Administración General del Estado. Esto es priorizar la I+D+i Es cierto que los recursos destinados a la I+D+i, la función 46, han bajado un 7%, pero solo la aplicación de la reducción de sueldos de los funcionarios produce un decrecimiento. En una época de crisis y de gran ajuste, España ha podido preservar su política inversora en I+D+i en el mismo nivel que en el 2010.

-Pero uno de los graves problemas es que las empresas privadas siguen invirtiendo muy poco en I+D+i en relación con los países más avanzados.

-El esfuerzo inversor de estos años ha correspondido a los presupuestos públicos. Nuestra gran asignatura pendiente es la inversión privada. El modelo económico que veníamos arrastrando no solo no ha ayudado, sino que ha sido la gran barrera para apostar por el conocimiento, pero ahora la crisis se ha encargado de demostrar que la inversión en I+D+i no es cuestión de conveniencia, sino de supervivencia y las grandes empresas que lideran la economía nacional lo han entendido muy bien. En un año tan difícil como fue el 2009 incrementaron un 15,7% su inversión en I+D+i. Es un magnífico dato porque han identificado que es la palanca clave para su competitividad. Nuestro reto es llevar esa reflexión a las pequeñas y medianas empresas. Lo que está claro es que los grandes países lo son porque han invertido más en I+D+i. No invierten porque son grandes, son grandes porque han invertido y han hecho una gran apuesta por la I+D+i.

-Su ministerio ha puesto en marcha la llamada Estrategia Estatal de Innovación ¿Cuáles son sus objetivos?

-España ha dado un salto muy importante tanto cualitativo como cuantitativo en producción científica, estamos entre las diez potencias mundiales, y nuestra oportunidad y nuestro reto es trasladar ese potencial científico a una economía innovadora. Nos hemos marcado tres objetivos para el 2015: incorporar 40.000 empresas más a la innovación, incrementar en 6.000 millones la inversión privada en I+D+i y generar 500.000 puestos de trabajo en media y alta tecnología. De momento no hemos firmado con Galicia la Estrategia, uno de cuyos objetivos es que las comunidades autónomas identifiquen sus fortalezas y dónde les puede ayudar el Estado a que sean competitivas a nivel internacional. Ese sería el camino para visualizar actuaciones específicas en Galicia.

-¿Cuáles son para usted las fortalezas de Galicia?

-La investigación en ciencias del mar es clara y yo diría que también en ciencias de la vida, donde hay grupos de investigación muy punteros y concretamente en nanotecnología, que tiene múltiples aplicaciones transversales.

-¿Es usted partidaria de la energía nuclear?

-La política energética hay que desvincularla claramente de la ideología y necesitamos un debate abierto y no demagógico sobre sus ventajas y desventajas con criterios científicos y realidades avaladas por expertos. Si en un ámbito hemos sabido traducir nuestro potencial científico en una realidad económica puntera a nivel internacional ha sido en las energías renovables. Somos el quinto país del mundo en patentes en esta materia. Desgraciadamente en este momento las energías renovables no con competitivas en precio y por tanto en nuestro mix energético tienen que mantenerse como un eje y una apuesta de futuro, pero no podemos renunciar a la energía nuclear, que es segura.

«Las fortalezas de Galicia están en las ciencias del mar y de la vida y en la nanotecnología»

«En época de crisis España ha mantenido su política inversora en I+D+i»

«La política energética hay que desvincularla claramente de la ideología»