Mar, Educación y Sanidade lanzan una campaña en los colegios para mejorar los hábitos alimenticios
17 nov 2010 . Actualizado a las 03:01 h.José es un pequeño de Touro que ayer repuso fuerzas a media mañana con un bocata de queso en crema con aceitunas. Contribuir a mejorar los hábitos alimenticios de los escolares gallegos como él es el objetivo de la campaña que ayer presentó la Xunta en el colegio público del municipio coruñés donde estudia José, uno de los mil alumnos de primaria de toda la comunidad a los que llegará el programa Ponlle as pilas ao teu bocata , una iniciativa impulsada por la Consellería do Mar para fomentar el consumo de conservas de pescado y marisco como una de las alternativas a la bollería industrial que acostumbran a zamparse los escolares en su tiempo de recreo.
José es un buen ejemplo de la necesidad de poner en marcha la campaña por una alimentación sana y equilibrada. No quiso en su bocata ninguno de los tres productos estrella de la campaña: atún, sardinas y mejillones. Ni la insistencia ni el esmero de los camareros de excepción con los que contó el lanzamiento de la iniciativa sirvieron para convencer al chaval, que ha sido, junto a otros 60 compañeros del centro de entre 8 y 11 años, uno de los comensales a los que sirvieron la conselleira de Mar, Rosa Quintana; Pilar Farjas y Jesús Vázquez, responsables de Sanidade y Educación, los dos departamentos autonómicos que colaboran en la campaña junto con la patronal conservera Anfaco.
El secretario general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescado, Juan Manuel Vieites, también se enfundó guantes de látex como los conselleiros para preparar y despachar bocatas entre los escolares, a los que mostraron las múltiples posibilidades que ofrecen las conservas del mar para elaborar tentempiés saludables. Zanahoria rallada, pimiento morrón, aceitunas, huevo cocido, tomate, cebolla y lechuga son algunos de los ingredientes que se presentan como complemento de los tres productos de pescado y marisco que se promueven en la campaña, en la que los escolares no solo desempeñarán el papel de destinatarios. Serán ellos los que, a través de la información que se les aporte, trasladen a los padres las ventajas de introducir las conservas en la dieta.