Aprobada en Turín la constitución del movimiento Slow Food en Galicia

SOCIEDAD

Velará por el buen comer y los productos ecológicos y en diciembre celebrará en Muxía su primera asamblea

05 nov 2009 . Actualizado a las 09:43 h.

El movimiento Slow (en inglés, 'lento') nace de manera oficial en Galicia tras la aprobación en Turín -la sede internacional- del Convivium gallego de Slow Food (comida lenta, en inglés), una de las ramas de esta asociación sin ánimo de lucro, nacida como respuesta a la invasión homogeneizadora de la comida rápida y el ritmo frenético de la vida actual. Propugna el buen comer y la defensa de los alimentos de calidad y se organiza territorialmente en convivia (en latín, banquetes o fiestas).

Después de varios años de gestación y un impulso definitivo el año pasado con las reuniones previas, «Turín acaba de aprobar nuestra constitución de forma oficial. Ahora celebraremos nuestra primera asamblea en la primera quincena de diciembre, posiblemente en Muxía», explica Jesús Trillo, presidente del Convivium Galicia.

En esa reunión se realizará una apertura al conjunto de la sociedad gallega «para que se den de alta quienes lo deseen», agrega. El objetivo será aprovechar «las buenas condiciones de Galicia para fomentar una vida más tranquila, el buen comer o los productos ecológicos, excepcionales por su calidad, su elaboración artesanal o que se hallen en peligro de desaparición», siempre que no estén amparados ya por una denominación de origen o una identificación geográfica protegida.

Se denominan productos baluarte, y coincidiendo con el nacimiento de la asociación gallega, Slow Food internacional ya ha catalogado dos de los promovidos por el Convivium Galicia: el millo corvo y la centolla de Lira. En trámite de aprobación se encuentra también el porco celta.

La protección de estos alimentos supondrá un compromiso para su promoción en restaurantes mediante campañas y jornadas específicas, y su exhibición en el encuentro anual Terra Madre, de Turín, en el que se dan cita convivia de todo el mundo.

Jesús Trillo pretende también que en la primera asamblea de diciembre se siembre la semilla del movimiento Cittá Slow ('ciudad lenta'). Existen ya varios ejemplos en España, pero la idea es que Galicia cuente lo antes posible con una representación.