Según las previsiones, habrá borrascas profundas y serán habituales las alertas por viento
22 sep 2009 . Actualizado a las 12:46 h.El otoño que hoy comienza va a ser un poco más caluroso de lo habitual en Galicia, pero más fresco que lo que se espera en el resto de España, y especialmente en la zona del Mediterráneo. Estas son las previsiones que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) presentó ayer de cara al próximo trimestre, aunque según su portavoz, Ángel Rivera, los vaticinios a largo plazo, dos o tres meses vista, tienen «escasa fiabilidad».
Según los datos de la Aemet, las predicciones apuntan a que en octubre, noviembre y diciembre se sufrirá una anomalía de entre un grado o grado y medio al alza en las áreas mediterráneas, mientras que en la comunidad gallega esta anomalía será solo de medio grado o menos.
Salvo en Baleares, donde se vivirá un otoño más húmedo de lo normal, se espera que las precipitaciones se mantengan en torno a valores normales. Al igual que el año pasado, parece que predominarán las borrascas frías, de carácter tormentoso, mientras que no parece que vaya a haber borrascas atlánticas, que son las que suelen dejar lluvia en toda España.
Sin embargo, estas previsiones no coinciden en plenitud con las realizadas por MeteoGalicia, pues aunque señala que será un otoño «sin grandes anomalías», tanto en temperatura como en precipitaciones, afirma que habrá borrascas circulando por el Atlántico que provocarán «mucha lluvia». Incluso prevé que en noviembre entrará aire frío que podría traer consigo las primeras nieves.
Según el portavoz del centro gallego de meteorología, Juan Taboada, las borrascas en otoño pueden ser «muy profundas», por lo que es habitual que se establezcan alertas por temperatura o viento. No obstante, también resaltó la «baja fiabilidad» de las predicciones estacionales para Galicia, ya que se encuentra situada en latitudes medias, por lo que «pequeños cambios» afectan al tiempo.
Por lo que respecta al balance del verano, la Aemet informó de que ha sido extremadamente cálido en toda España, con la excepción del suroeste de Galicia, donde el período ha resultado más fresco de lo normal. En el resto de la comunidad y en Asturias fue lo habitual.
En este caso, las conclusiones de MeteoGalicia vuelven a ser algo distintas, pues califica el verano en la región como «frío y lluvioso», debido al mal tiempo registrado en julio, donde el índice de lluvias estuvo «muy por encima de lo normal».
Respecto a las precipitaciones, la Aemet indica que, al igual que en la primavera pasada, el período estival también ha sido deficitario en el cómputo de España. En conjunto han sido un 30% inferiores al promedio. De hecho, la ausencia de lluvias ha convertido al verano del 2009 en el tercero más seco de lo que va del siglo XXI, por detrás solo del 2001 y del 2005.
A falta de 10 días para terminar el vigente año hidrológico, de octubre de un año a septiembre del siguiente, el ejercicio se va a saldar con un 15% menos de lluvia que los valores medios normales, y cuatro puntos más de déficit que el anterior año hidrológico. Pero para Ángel Rivera, hablar de sequía «es prematuro», aunque haría falta un otoño lluvioso para aliviar los temores de algunas zonas.
A pesar de todo, la Aemet indica que el año hidrológico está siendo especialmente seco en la vertiente atlántica, donde el déficit supera el 25%, al estar siendo más acusado en Galicia, Extremadura, Madrid, sur y oeste de Castilla y León y norte y oeste de Castilla-La Mancha. Superan los valores normales Baleares y Canarias.