Richard Hamilton y Vicente Todolí reflexionan en un libro sobre la relación entre la gastronomía de El Bulli y el mundo del arte.
14 abr 2009 . Actualizado a las 19:58 h.«Los gastrónomos de vanguardia somos cocineros y queremos seguir siendo cocineros, no tenemos interés en ser artistas, pero sí en dialogar con el arte». Ferrán Adriá, reconocido cuatro veces como el mejor restaurador según la revista The Restaurant magazine, protagoniza un libro que recopila debates, textos y mesas redondas entre reconocidos artisel restaurante.
Se pidió a estos invitados que enviaran una contribución en la que contaran la experiencia. Estos son algunos de los testimonios. «No nos dieron ningún tipo de cubierto hasta la mitad de la comida, por lo que imperó una maravillosa sensación de tactilidad que en realidad hizo surgir al niño que llevamos dentro. Nos animaron a jugar con la comida», dijo Adrian Searle, crítico de arte para The Guardian.
«Yo diría que la capacidad que tienen los alimentos de generar una respuesta emotiva podría calificarse como una expresión artística», apuntó Heston Blumenthal, chef del restaurante The Fat Duck. «Me sentía como en un estado de aturdimiento provocado por las drogas, no sé, era una sensación fílmica pero también como si me encontrara en un viaje con un destino claro. Pensé que era extraordinario, realmente me sorprendió», comentó la artista Anya Gallaccio.
«Desde el principio, la comida ha estado vinculada a la ceremonia; ceremonia que se ha usado como un medio de control», señaló Antoni Miralda. «¿A Ferrán se le ha calificado desacertadamente como la persona que ha transformado la cocina en un arte? Sería como decir que James Joyce hizo de la literatura un arte», dijo Peter Kubelka, cineasta experimental. «Obviamente, el instinto de comer es una inercia muy fuerte en nuestras vidas y me gustaría referirme a él como una especie de dictador interno que nos obliga a venir a El Bulli», aseveró Carsten Höller.
Publicado en alemán, inglés, castellano y catalán, recoge por primera vez todos los platos creados en El Bulli, desde 1987. La portada es obra de Matt Groening, el creador de Los Simpsons, que ilustra a un Adrià amarillo en forma de Bart Simpson. Ferrán Adrià está considerado el cocinero que revoluciona constantemente el mundo de la alta gastronomía. El diez de agosto de 2003 The New York Times Magazine dedicó 16 páginas a la Nueva Nouvelle Cuisine, poniéndole en su portada y en cabeza de la vanguardia gastronómica española y mundial. Más tarde, Le Monde hablaba de él como del mejor cocinero del mundo y la revista Time lo incluyó entre las 100 personalidades más influyentes del planeta.