Un estudio constata que el 67 por ciento de los consumidores de cocaína desarrolla dependencia del alcohol.
16 dic 2008 . Actualizado a las 21:13 h.Que la cocaína y el alcohol forman una pareja muy bien avenida se sabía. Ahora un estudio le ha puesto las cifras necesarias para determinar hasta qué punto ambas drogas se alimentan mutuamente. El trabajo, publicado en 'Journal of Clinical Psychiatry', certifica que el 67 por ciento de los consumidores de cocaína participantes en la investigación desarrollaron dependencia del alcohol, cinco veces más que aquellos que bebían pero no esnifaban. El riesgo de mezclar ambas sustancias es aún mayor en hombres que en mujeres.
Los cocainómanos masculinos acreditaron un riesgo de alcoholismo 12,3 veces superior que aquellos que no consumían coca, mientras entre las féminas el riesgo era 7 veces mayor.
En la investigación tomaron parte el Instituto de Neurociencias de San Joan d'Alacant (CSIC-Universidad Miguel Hernández), el Centro de Salud Ambiental de Retiro (Madrid) y el Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid. Se realizó a partir de las experiencias de 481 pacientes que fueron identificados como bebedores de riesgo en el transcurso de visitas a centros de atención primaria. Se dividieron en dos grupos, los que además de beber esnifaban polvo blanco y los que se limitaban a las copas.
Cuatro años después, dos de cada tres individuos del primer grupo (67 por ciento) eran alcohólicos; entre los bebedores, sólo el 13,6 por ciento había alcanzado tal condición, casi cinco veces menos.
Estos resultados se dirigen sobre todo a «las estrategias preventivas que podrían implantarse en la atención primaria», explica Jorge Manzanares, del Instituto de Neurociencias San Joan d'Alacant. A su juicio, sería importante que los trabajadores sanitarios «no sólo detectaran a los bebedores excesivos», sino que, si además consumen cocaína, «se les hagan las recomendaciones necesarias y un seguimiento para evitar el desarrollo de la dependencia».
Podio
España ocupa podio mundial tanto en consumo de cocaína como de alcohol. Según el informe 2007 sobre drogas de Naciones Unidas, tenemos la mayor tasa de consumo de coca del planeta, con un 3 por ciento, seguida de cerca por Estados Unidos (2,8 por ciento) y el Reino Unido (2,4 por ciento), en función del número de personas de entre 15 y 64 años que admiten haber esnifado en los doce meses previos a la encuesta. El dato positivo es que este porcentaje ha dejado de crecer en los últimos años.
En el caso del alcohol, el último sondeo del Ministerio de Sanidad estima que la proporción de bebedores de riesgo ha bajado del 5,5 por ciento de 2005 hasta el 3,5 por ciento del año pasado.
Estas dos sustancias protagonizaron la mayor parte de las urgencias hospitalarias en 2005, último año con estadísticas oficiales; el 55 por ciento debido a la cocaína y el 32,3 por ciento al alcohol. El consumo de polvo de coca se concentra más en varones de entre 15 y 34 años y está ligado al ocio y el esparcimiento. También beben más ellos, aunque las cifras de consumo alcohólico y de otras drogas de las mujeres se han ido acercando en los últimos años.