La orina de los astronautas se transforma en agua potable

Victoria Toro

SOCIEDAD

25 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La NASA ha conseguido desarrollar un sistema para convertir la orina y el sudor de los astronautas en agua potable. La última misión del Endeavour incluía instalar en la estación espacial internacional la máquina que lo hará posible. Durante unos meses, el líquido que se obtenga se almacenará y se transportará hasta la Tierra para comprobar que el método funciona.

El sistema es muy sencillo en la Tierra, pero muy complicado en el espacio. En ausencia de gravedad es imposible hacer la destilación porque los contaminantes no se separarán. La NASA ha trabajado durante muchos años para solucionarlo.

El resultado es, según Bob Bagdigian, jefe del proyecto en el Centro de Vuelos Marshall de la NASA, «una especie de barril inclinado hacia un lado». Ese barril no es otra cosa que la destiladora con un campo de gravedad artificial. De esa forma se consigue que los contaminantes se peguen a los lados y el vapor se concentre en el medio. Ese vapor se recoge y se enfría. Después se pasa por filtros y se analiza para comprobar que no tiene microorganismos perjudiciales. «El agua que obtenemos entonces -explica Bagdigian- iguala y, en algunos casos supera, las normativas municipales sobre calidad».

Cuando funcione a pleno rendimiento, la NASA espera que se reduzca hasta en un 65% el aporte de agua potable que en la actualidad se lleva en el transbordador o mediante cohetes. Además permitirá duplicar la población de la estación espacial, de tres a seis astronautas. Y, por último, resolverá uno de los grande problemas a la hora de diseñar la instalación de bases en la Luna o de planear misiones tripuladas a Marte.