La «happy pizza», con ingredientes que te colocan

Efe

SOCIEDAD

La pizza de marihuana es el plato estrella de la carta en los restaurantes de Camboya.

30 abr 2008 . Actualizado a las 19:09 h.

La pizza al más puro estilo italiano ahora tiene algo especial que te hace sentir más feliz. En Camboya le añaden un ingrediente típico de la zona, la marihuana, obteniendo un resultado que allí llaman la «happy pizza».

Este alimento cautiva a los jóvenes turistas extranjeros que visitan el exótico país asiático. La pizza feliz ha llegado a ser tan famosa que su degustación la recomiendan la popular guía de viaje Lonely Planet y se habla de ella en YouTube, donde se pueden encontrar cientos de vídeos que explican los efectos alucinógenos.

La mayoría de los restaurantes que sirven este plato están situados a lo largo del paseo a orillas del río que cruza Phnom Penh, la capital camboyana, y en todos ellos la cantidad de marihuana con la que se condimenta la pizza va al gusto del nivel de «felicidad» que pide el comensal.

En estos locales, cuando el cliente encarga la pizza, el camarero casi siempre responde: «¿La quiere un poco feliz, bastante feliz o muy feliz?», dando a entender la cantidad de marihuana que el cocinero empleará para preparar ese plato del menú.

Virak, camarero de una de estas pizzerías en las que la marihuana está a la vista, apunta que no todos los clientes que piden una pizza feliz saben que contiene cannabis, pero la piden porque el nombre les atrae. «Cuando descubren que se trata de una pizza con marihuana se marchan del restaurante indignados», explica el empleado.

En estos establecimientos, con atmósfera familiar, se ve a personas de avanzada edad y a padres que con sus hijos pequeños comen ajenos a las risas que provienen de otras mesas ocupadas por jóvenes que saborean la pizza feliz.

Efectos adversos

Los efectos de la ingestión de marihuana aparecen, como pronto, una hora después, y en ocasiones tienen consecuencias desagradables para el viajero. Hay turistas que han perdido el avión de vuelta a casa por haberse quedado dormidos a causa de la marihuana, unos se han pasado varios días durmiendo en su habitación del hotel, y otros han acabado perdiendo parte de sus vacaciones en un hospital de Phnom Penh, según relatan los lugareños.

La cadena de pizzerías más grande del país, Pizza Company, que aterrizó en Camboya en 1991, al mismo tiempo que las fuerzas de pacificación de Naciones Unidas, se ha hecho eco de esta rareza culinaria y para aumentar su clientela incluyó la pizza feliz en su carta familiar.

No obstante, siguen siendo las pizzas de los pequeños restaurantes las que atraen el mayor número de jóvenes viajeros de casi medio mundo, que llegan a Camboya en busca de aventura.

Erradicar la droga

Pero la pizza feliz, que durante una década ha sido el plato estrella de decenas de restaurantes, puede desaparecer próximamente de la carta, que amablemente presenta el camarero, a quien siempre le queda el recurso de susurrar al oído del cliente que nada ha cambiado.

El Gobierno de Camboya, que desde que terminó la guerra en 1991 asegura que acabará con la droga, quiere que la marihuana desaparezca del país, donde el cannabis es ya casi parte de la tradición.

De momento el rito de la pizza feliz sobrevive, pero los precios han subido y los dueños de los locales piden cierta reserva a los clientes que la encargan.

El responsable de uno de estos locales, cuyas pizzas con marihuana cuestan alrededor de tres euros, o cuatro dólares y medio, indica que debido a la presión de la policía los precios aumentan día a día y es cada vez más difícil abastecerse de la cantidad de droga suficiente para satisfacer la demanda.

«El ingrediente especial cuesta mucho más ahora, pero nuestro mayor temor es que los viajeros cada vez pidan menos la pizza feliz asustados porque ya saben que es ilegal», explica.