Las solicitudes de ayuda para cubrir necesidades básicas crecen un 14 %

Margarita Mosteiro Miguel
Marga Mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Las entidades benéficas de Santiago están desbordadas este año por la creciente demanda

06 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Las entidades benéficas de Santiago están desbordadas por el incremento de llamadas de auxilio que reciben cada día de personas que no solo precisan ayuda para hacer frente al pago de recibos de servicios básicos, sino también para comer. Cada mes son más de cinco mil.

«Hasta ocho familias cada día llaman» a la oficina de la Fundación de Amigos de Galicia, afirma Jesús Busto, presidente de la entidad. Su asociación reparte cuatro millones de kilos de alimentos al año en Galicia y en la zona de Santiago ayuda a ochocientas personas. Busto explica que «ya no se puede hablar de un perfil concreto, hay mujeres solas con hijos a su cargo sin manutención, mujeres que cobran el Risga, mujeres procedentes de la violencia de género e inmigrantes y muchos parados sin prestación». Las familias a las que auxilian son «derivadas de los ayuntamientos o vienen desde Cruz Roja» para evitar las duplicidades.

Además de solicitar ayuda para poner un plato de comida cada día en la mesa, cientos de compostelanos recurren a Cáritas para poder pagar los recibos de los servicios básicos y evitar el corte del agua y de la luz. Amelia Pereira, presidenta de Cáritas Interparroquial, apuntó que la mayor parte de las peticiciones son «de emergencia» para «comida, luz y agua». En lo que va de año, Cáritas Interparroquial atendió a casi cuatro mil personas. Amelia Pereira aseguró que el número final superará con creces el del pasado año, cuando fueron casi cinco mil. Aunque el colectivo de inmigrantes es muy elevado, la presidenta de Cáritas aprecia un cambio en las personas que se acercan a la sede de San Roque. «Hay gente nueva, pero también otros muchos que ya tenían una vida normalizada y el paro ha tirado por tierra el esfuerzo de años de lucha por lograr una vida mejor», lamenta Pereira. Estos últimos casos son «terribles, porque resulta más difícil volver a levantarse después de haber pasado antes por una situación de pobreza extrema».

Por su parte, Cáritas Diocesana añade que el incremento con respecto al pasado año será de entorno a 14 % y llama la atención sobre los cambios que se están registrando en los albergues de la entidad. «Antes eran todos hombres, ahora empiezan a demandarse plazas para mujeres», afirma un portavoz de la entidad y destaca el hecho de que «algunas mujeres conseguían algún ingreso de la economía sumergida, sobre todo servicio doméstico, que les valía para sobrevivir; ahora no hay ni estos empleos». Recuerda que la misión de Cáritas es «erradicar la pobreza, no paliarla; esto es competencia de la Administración».

Amigos de Galicia

La Fundación Amigos de Galicia reparte cuatro millones de kilos de alimentos este año en toda la comunidad autónoma. Solo en Santiago, esta entidad ayuda a ochocientas personas.