Makiko y el derecho de la gente a cantar

i. ameixeiras redac.santiago@lavoz.es

SANTIAGO

09 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

1«Cantar es un privilegio para todos y no solo para los privilegiados». Makiko Kitago jugó al arte de los soportales y a la música taciturna del Festival de los Abrazos. Caminó entre bailarines, coristas y músicos de toda índole. Ahora, en persecución de un canto cualquiera, como el que responde a un impulso, vuelve a Compostela para soltar las riendas que aturullan las cuerdas vocales y, así, proponer una canción para aquellos que han creído que aprender música tiene algo que ver con talleres mecánicos. La jornada transcurre en la librería Aenea con la idea de combinar letra y melodía. Como en una oda al buen sentir, Makiko Kitago reclama el derecho a percibir la vida «a través del sonido que pronuncia tu propia garganta, sin juicio». Sin duda, parece que Makiko ha venido a enseñar al lugar propicio, pues en Santiago todavía se puede escuchar el gallo a la amanecida.

Vida de un escritor

2 Ropa de época e historia de un exilio, la del escritor austríaco Stefan Zweig. La compañía Lagarta Lagarta presentará «Unha hora na vida de Stefan Zweig» los días 23 y 24 en Santiago, tras probar las tablas de Narón. Rosa Álvarez, directora, y Antonio Tabares, guionista, convierten en ficción la verdadera impaciencia de lector y el temperamento de Zweig. Gran opositor a la II Guerra Mundial, trazó su diáspora al otro lado del mundo, en Brasil. A ella dio término quitándose la vida en 1942 junto a su segunda esposa, Lotte Altmann. No obstante, en el último momento algo trastocará sus planes. Ernesto Chao, Belén Constenla e César Cambeiro conforman el elenco de actores.

La nueva ciencia en moto

3La tecnología se traslada al mar en moto. Así, Blusens, la compañía compostelana, también toma cartas en la Concentración Mototurística de las Rías Baixas de este fin de semana. Los pilotos Maverick y Tito estarán bajo la carpa de la entidad como para dar parte de la cultura de la velocidad y del arte de conducir una moto.