Las obras en el tejado del pórtico de la Gloria se harán bajo un andamio cubierto

Concha Pino SANTIAGO/LA VOZ.

SANTIAGO

28 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Los responsables de Patrimonio cerraron el jueves con la empresa lucense Resconsa el diseño del andamiaje que es preciso instalar en las cubiertas de la catedral por encima del pórtico de la Gloria para llevar a cabo la actuación de emergencia aprobada por el Consello de la Xunta el 4 de noviembre. Firmaron, además, el plan de seguridad que presentó la empresa a tenor de las líneas marcadas en el proyecto.

Esta intervención fue decidida a la vista de un informe presentado por la codirección técnica del Proyecto Catedral, en el que se enmarca el proceso en marcha para la conservación preventiva y la rehabilitación del conjunto escultórico románico, para eliminar las filtraciones de agua que ocasionan los mayores problemas en la obra del Maestro Mateo. El punto vulnerable es donde se produce el encuentro de la estructura de la fábrica románica de la catedral con la barroca que se levantó siglos después para construir la fachada del Obradoiro.

Resconsa tiene que contratar ya el andamiaje que se acordó colocar en el tejado, una estructura cubierta, porque tiene que servir como paraguas mientras se realizan las obras a la intemperie en las cubiertas, y que estará dotada de una base plana para los trabajos. El tipo de acceso para subir los materiales para la obra está pendiente de que el Cabildo de la catedral dé su aprobación. En cualquier caso prevén que no será aparatoso, porque es un complemento para prestar servicio.

El proyecto para estas obras de emergencia fue adjudicado a la empresa especializada lucense hace un par de semanas. El arquitecto responsable es el compostelano Iago Seara, que es también al que nombró la Dirección Xeral de Patrimonio para la codirección técnica que se encarga del pórtico de la Gloria. Para esta actuación de emergencia, Patrimonio designó al arquitecto de esta área Manuel Chaín para el seguimiento de los trabajos, que en principio tienen un plazo de ejecución de tres meses, pero que al tratarse de un procedimiento cautelado no se descarta que se amplíe a medida que el proceso avance.

Iago Seara manifestó que se trata de intervenir en un punto «muy crítico e complexo, porque cada ensamble é un problema de entrada de auga». Por otro lado, explicó que la intervención implica documentar «de maneira absolutamente rigorosa» todo el proceso. Por eso los trabajos han empezado con la parte organizativa de la obra, tomando mediciones y datos para el estudio y la documentación básica previa y obligada para realizar una planimetría exacta.

El procedimiento que siguen, de acuerdo con la empresa, es una ortofotometría, un escaneado punto por punto de la piedra, los morteros y demás elementos, con lo que harán una cartografía exacta para detectar donde están las sales que se acumulan por la humedad, los tipos de granito de los sillares y demás detalles.

Una vez que se realicen estas obras se podrá comprobar si se han eliminado los problemas de humedad que padece el pórtico de la Gloria. Sobre todo porque existe una zona intermedia entre los tejados y la obra de Mateo, la de la tribuna, para poder evaluar los resultados.