El futuro tramo tendrá dos viaductos y solo habrá que ampliar un paso subterráneo del actual trazado
SANTIAGO
Los técnicos que participen en el concurso deberán tener en cuenta las exigencias de la Xunta. La primera de ellas es que el desdoblamiento suponga construir un trazado de 18,20 kilómetros, una longitud que podrá aumentar con los ramales de conexión, que quedarán especificados en el proyecto. La Xunta destaca que «prevese o desdobramento do corredor Brión- Noia inicialmente pola marxe esquerda ata o punto kilométrico 8, e no resto da lonxitude pola marxe dereita».
Otro de los condicionantes que establece la Xunta es que habrá que construir dos viaductos paralelos al corredor, uno en Naveira de 280 metros y otro en Paxares de 475 metros de longitud.
Teniendo en cuenta que los enlaces y pasos superiores e inferiores del corredor Santiago-Noia se diseñaron y ya se están construyendo para transformarse en autovía, ninguno de ellos, excepto un acceso inferior en el tramo entre Santiago y Brión, necesitará ampliación.
Otra de la exigencias que plantea la Xunta a las empresas que participen en el concurso ya convocado es que incluyan una análisis de posibles soluciones que minimicen los cortes de tráfico durante la ejecución de las obras para que la circulación viaria sea lo más fluida posible durante los trabajos de desdoblamiento del corredor.
En cuanto al estudio de impacto ambiental, el proyecto tendrá que incluir una prospección arqueológica intensiva, y un estudio paisajístico para que la solución adoptada tenga el menor impacto posible.
La Consellería de Medio Ambiente, Infraestruturas e Territorio ha repartido el coste de estos trabajos en dos anualidades. Para este ejercicio reserva una partida de cien mil euros, correspondiéndole al año 2011 los 295.070 restantes.