La intervención en el Pórtico da Gloria no se decidirá hasta finales del 2010

C. P.

SANTIAGO CIUDAD

11 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La intervención en el Pórtico da Gloria para proceder a su restauración y conservación no dará comienzo al menos hasta dentro de un año. Los estudios previos contemplados en el Proyecto Catedral de Santiago, que se lleva a cabo con el patrocinio de la Fundación Barrié de la Maza, se centran desde hace unos días en el análisis estructural del conjunto románico y tardarán once meses en disponer de todos los datos para evaluarlos y concretar qué tipo de acciones y de qué manera se realizan.

En los primeros días de este mes quedaron instalados nuevos sensores. Si en junio colocaron los destinados a registrar las condiciones ambientales de la obra del Mestre Mateo, la fase de monitorización que empezó ahora es para conocer la situación de la estructura. Sabrán cómo es el sistema constructivo y la estructura del Pórtico, la cinética de sus muros y las causas de las fisuras que presenta, además de establecer y comprobar los puntos críticos de las esculturas.

La responsabilidad de estos trabajos es de la cooperativa italiana COO. BE. C, a la que le adjudicaron las labores de conservación preventiva y la propuesta de intervención. Dos grupos de especialistas se encargaron de instalar los sofisticados equipos de medición, aparatos que en algún caso hacen pensar más en un paciente humano que pétreo. Porque uno de los grupos montó los sensores para el control de lesiones en la estructura, y otro llevó a cabo investigaciones sónicas, videoendoscópicas, magnetotérmicas y con georradar. Pero los aparatos que van a quedar colocados durante los próximos once meses son fisurómetros e inclinómetros, que se suman a los sensores colocados en el mes de junio para medir temperatura y humedad relativa del aire, temperatura de contacto, condensación y velocidad del viento en el área del monumento.

Hay una serie de estudios que se van a realizar a partir de los datos obtenidos estos días con las mediciones practicadas. Para conocer el espesor de los sillares del arco central del Pórtico, el sistema de construcción y de anclaje de las esculturas del tímpano, así como la técnica con la que construyeron los pilares del conjunto, lo van a investigar con los datos de un videoendoscopio, una sonda de fibra óptica de seis milímetros de diámetro. La resistencia mecánica de la piedra la obtendrán mediante investigaciones ultrasónicas, y con otras denominadas magnetotérmicas van a comprobar si existen elementos metálicos usados para anclar las esculturas. Con un georradar conocerán cómo se construyó el tímpano y los muros internos de las pilastras. Esta auscultación la realizan desde la parte posterior del arco central.

La textura mural de las bóvedas del Pórtico es otra característica que van a conocer los técnicos después de analizar los datos de las termografías que ya realizaron durante varias noches, y que también les va a permitir detectar posibles lesiones.

Por si no lo supieran todo de las entrañas de la joya arquitectónica, harán un relieve topográfico del Pórtico y de la fachada del Obradoiro para comparar sus datos con los de la fotogrametría que realizó en 1988 el Instituto del Patrimonio Cultural de España.

Mientras los monitores trabajan, continúan las visitas guiadas al monumento programadas por la Fundación Barrié.