La Xunta licita por 2,5 millones de euros una de las variantes de la AG-59 previstas en Brión
SANTIAGO
El Consello de la Xunta de Galicia aprobó ayer el decreto de declaración de utilidad pública de los terrenos y derechos afectados por la construcción de una de las dos variantes de la AG-59 en el municipio brionés. Se trata de la variante de la carretera comarcal AC-300, entre A Picaraña y Brión.
Para ejecutar este proyecto, Política Territorial tiene previsto invertir 2,5 millones de euros, de los que 780.000 euros corresponderán al pago por las expropiaciones de los terrenos por los que discurrirá este nuevo vial, que medirá 1,4 kilómetros.
La futura carretera tendrá una plataforma de ocho metros de ancho, dividida en dos carriles de 3,5 metros cada uno y dos metros de aceras.
Cuando este ramal esté listo, el tráfico que hasta ahora discurre junto a la iglesia de la parroquia de Os Ánxeles y la parroquia de Bastavales, podrá tomar este acceso con lo que se reducirá ostensiblemente el paso de automóviles por una zona densamente poblada.
La aprobación del decreto de declaración de utilidad pública de esta obra fue muy bien acogida por el Concello de Brión. Su alcalde, Xosé Luís García, señaló que se trataba «dunha noticia extraordinaria para os veciños e veciñas de Brión» porque, añadió, «permitirá sacar tráfico dun punto complicado, como é o entorno da igrexa dos Ánxeles e mellorará o acceso á autovía dos veciños e veciñas de Bastavales».
El regidor también agradeció a la conselleira de Política Territorial, María José Caride, la premura con la que se ha producido este anuncio, ya que García le recordó a Caride la necesidad de ejecutar esta obra el pasado 28 de enero, coincidiendo con el acto de colocación de la primera piedra de las obras de construcción del corredor entre Brión y Noia.
Durante aquel encuentro, el alcalde brionés también le recordó a Caride el compromiso de ejecutar otra variante para acceder a la AG-59. Se trata del ramal denominado vial oeste, que permitirá conectar la autovía en la zona de Barreiro, lo que permitirá desviar el tráfico que procede de Negreira, que ya podrá acceder a la AG-59 sin tener que llegar a Bertamiráns.