La conexión deberá entrar en servicio en la próxima primavera, según los plazos que establece el contrato
26 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.La construcción de la autovía que en la próxima primavera debe comunicar Santiago y Brión, y mitigar el intenso tráfico que soporta la AC-543 entre Compostela y Bertamiráns, ha entrado en su recta final. La futura AG-56 dispone ya de firme en el 70% de su trazado, lo que equivale a 9 de los 12 kilómetros de recorrido que tendrá esta infraestructura.
También están prácticamente finalizadas las excavaciones. Desde que las máquinas comenzaron a trabajar, en enero del 2006, han movido el 98% de los 4,5 millones de metros cúbicos de terreno que es necesario excavar. Los trabajos ya han concluido en los 19 viaductos con los que contará el vial y también en los cuatro pasos inferiores que se distribuyen a lo largo de trazado para hacer posible la continuidad de la circulación en la red viaria local. Entre otros, la autovía contará con enlaces en Bertamiráns y en Gundín, donde la AG-56 conectará con la carretera actual que conecta Santiago y Noia, la AC-543.
Glorietas y señalización
Con las obras del trazado muy avanzadas, los trabajos se centrarán en las próximas semanas en lo que se consideran remates, como la habilitación de glorietas para ordenar la circulación en los accesos, la ejecución de caminos de servicio y la señalización horizontal y vertical.
La unión temporal de empresas adjudicataria del proyecto (que está integrada por Dragados, Extraco y Francisco Gómez y Cía.) deberá tener lista la autovía a Brión para su entrada en servicio en la primavera próxima. Para ello, la unión de empresas que está ejecutando la infraestructura proyectada en régimen de concesión invertirá en el 2008 en las obras 7,7 millones de euros, la última partida de los 108 millones de coste global. La autovía dará servicio a 133.000 vecinos de los municipios por los que discurrirá y permitirá disponer de una alternativa de alta capacidad a una carretera colapsada en las horas punta y que soporta 20.000 vehículos diarios. Según los cálculos que manejaba Política Territorial cuando adjudicó la autovía, la AG-56 incrementará la circulación entre Santiago y Brión hasta 25.000 vehículos por día en su primer año de funcionamiento. La previsión es que ese volumen de tráfico supere los 37.000 vehículos diarios en el horizonte del año 2030, de acuerdo con los planes de expansión de Bertamiráns y Brión.
La autovía tendrá continuidad con una segunda fase hasta Noia, a la que la Sociedade Pública de Investimentos destinará 15 millones de euros en el 2008.