«A mi padre lo apuñalaron»

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

En directo | Habla un afectado

14 dic 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

Pontevedra no sobresale por tener altos índices delictivos, más bien al contrario, pero ser taxista no está exento de riesgos. Es el caso de un pontevedrés que ya ha sufrido dos atracos en su carrera. En uno de ellos, el asalto se produjo en una carrera hasta Carballiño y los ladrones empuñaban un puñal y una pistola que le colocaron cerca del cuello. «Tras apearse los atracadores del coche, imagínate lo que hice... Bajarme el pantalón y, no sé si de miedo o de gusto, cagarme». El caso de su progenitor fue más grave. «A mi padre, por desgracia, le metieron siete puñaladas y salió de ellas. Lo pudo contar». Lo cierto es que son pocos los que no han sufrido en sus carnes algún susto, aunque, en la mayor parte de las ocasiones, todo se queda en una carrera sin cobrar y el cliente abandonando el coche como alma que lleva el diablo, algo que también resulta frecuente en Arousa. Eso sí, los ladrones no entienden de sexos. Así de clara se manifestó esta semana una de las dos mujeres autopatrono que operan en Marín: «A la hora de robar les da igual. Está demostrado que, en estos casos, vamos a morir tanto el hombre como la mujer».