La Justicia analiza las licencias de otras 2 urbanizaciones de Poio

Alfredo López Penide
López Penide POIO / LA VOZ

PONTEVEDRA

El Concello teme que las autorizaciones municipales sean anuladas

02 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Tras conocerse la sentencia que anuló las licencias concedidas a veintiocho viviendas levantadas en la calle Illa Canosa (Poio), ayer trascendió que otras dos urbanizaciones construidas en el entorno de Boavista pueden hallarse en la misma situación. De hecho, tal y como confirmaron fuentes municipales y de la comunidad de montes de San Salvador, se está a la espera de que los tribunales resuelvan la petición de nulidad de licencias.

Tal y como precisó el propio alcalde de Poio, Luciano Sobral, los tres proyectos urbanísticos tendrían el mismo trasfondo y, por tanto, previsiblemente recibirán el mismo tratamiento por parte de los jueces. Días atrás explicó que en el plan parcial para Boavista de los años setenta existían tres zonas que «tiñan edificación en altura e que nunca se chegaron a executar».

Para impulsar esta zona de A Caeira, en el nuevo PXOM aprobado en el 2000 se optó por modificar tal circunstancia y optar por la construcción de viviendas unifamiliares adosadas. Para culminar este objetivo, «se redactaron tres proxectos de edificación para esas tres parcelas».

Sin embargo, y como consecuencia de la demanda interpuesta por la comunidad de montes de San Salvador, el Supremo anuló el estudio de detalle de la parcela existente en Illa Canosa, así como hizo lo propio con la aprobación definitiva del Plan de Ordenación «en el específico extremo relativo a la ordenación del ámbito físico afectado por los indicados estudio de detalle y licencia».

Los argumentos

Los magistrados inciden en que se abrió un vial público -desde el Concello defienden que es privado- que no estaba contemplado en el plan, así como que se han producido otras infracciones relacionadas con el retranqueo y la edificabilidad.

Fuentes de la comunidad de montes consideran que «similares discrepancias» se pueden hallar en las otras dos urbanizaciones construidas en Boavista. Se da la paradoja de que la empresa que levantó una de ellas se personó como parte en el procedimiento abierto a raíz de las viviendas de Illa Canosa y su recurso fue desestimado.

Entre otras cuestiones, desde el Tribunal Supremo se afirma que no es procedente que hubiese alegado «una hipotética indefensión que no le es propia».

En cualquier caso, ante la certeza del resultado final de ambos procesos judiciales, el Concello de Poio se ha puesto manos a la obra para solucionar la problemática. Luciano Sobral lanzó un mensaje tranquilizador al reiterar su convencimiento de que todas las viviendas son legalizables.