El Ayuntamiento aguarda una reacción del arrendatario y el propietario del edificio del Savoy

PONTEVEDRA

21 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Concello ya notificó al arrendatario del Savoy la caducidad de la licencia de rehabilitación del edificio, una vez superado con creces el plazo de seis meses para comenzar los trabajos. Asimismo, comunicó al propietario la apertura del expediente disciplinario que le obliga a ejecutar obras de reparación urgente por motivos de seguridad ante el ruinoso estado del inmueble.

Estas notificaciones conllevan un trámite de audiencia para que los afectados aleguen contra dichas resoluciones y, en función de sus argumentos, actuar en consecuencia.

Fuentes municipales indicaron que no existe de momento ningún indicio de que la rehabilitación del Savoy pueda salvarse in extremis. No obstante, cabría esperar la posibilidad de un acuerdo entre propietario y arrendatario que permita seguir adelante con el proyecto por interés mutuo. Sin descartar tampoco un traspaso o la entrada de un nuevo socio.

La junta de gobierno local acordó el pasado día 8 incoar la declaración de caducidad de la licencia de rehabilitación del Savoy que le había concedido en junio del 2009 al empresario que alquiló el inmueble para reabrirlo como cafetería. Este promotor lleva pagando 6.000 euros mensuales de alquiler desde el 2007 y, después de dos años, tiene frenado su proyecto, supuestamente por problemas de financiación derivados de la actual crisis económica. Y es de suponer que después de todo el dinero gastado, no solo en alquiler, sino en la redacción y tramitación del proyecto, intente conseguir una prórroga de la licencia caducada.

De no ser así y en caso de que desista definitivamente de su proyecto, el dueño del Savoy tendrá que volver a asumir toda la responsabilidad sobre el futuro del edificio. De momento, ya recae sobre él la orden municipal de reparación urgente en base a un informe técnico que acredita un riesgo real de desprendimiento de elementos de la fachada del inmueble e incluso de desplome. Una vez que concluya el período de alegaciones, dispondrá de 15 días para realizar esa reparación. Y si no la acomete, el Concello podría ejecutar las obras subsidiariamente, pasándole la factura al propietario, además de la multa correspondiente.