Promotores de Barro-Meis dicen que se adelantará a la Plisan de Salvaterra

A. Castroverde

PONTEVEDRA

30 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El polígono de Barro-Meis se adelantará en su entrada en funcionamiento a la otra gran superficie industrial de la provincia, la Plisan de Salvaterra-As Neves, según aseguraron ayer dirigentes populares en un visita a las obras. Las primeras parcelas de Barro-Meis comenzarán a entregarse en diciembre, mientras que la Plisan lleva actualmente «dous anos» de retraso, de acuerdo con los cómputos de Alberto Núñez Feijoo, presidente del PP gallego y ex conselleiro de Política Territorial.

Más del 50% de las obras del polígono industrial de Barro-Meis, en lo que atañe al sector de Outeda-Curro, están ya ejecutadas, según indicó ayer la Diputación, organismo que promueve y construye el nuevo parque empresarial, a través de su organismo autónomo Instituto para el Equipamiento y Promoción de Suelo Industrial de Pontevedra (Ipespo). De momento, están realizados el 95% del movimiento de las tierras y un 70% de los servicios. Además, se han instalado casi cuatro kilómetros de bordillos y se han realizado 30.000 metros cuadrados de hidrosiembra en taludes.

Según los datos facilitados por Núñez, de los 13 millones de metros cuadrados que dejó previstos la Xunta en la etapa del PP, solo se han puesto a disposición de la iniciativa privada un total de 100.000. Núñez dijo que existe una demora del 99% entre polígonos retrasados y sin iniciar. Según estos datos, actualmente están sin partida los polígonos de A Guarda-O Rosal, Tomiño y Ponteareas, mientras que en Mos se acaba de iniciar la primera fase.

Destacó además que en la Plisan de Salvaterra-As Neves no hay ni un metro cuadrado que se pueda poner ya a disposición de la iniciativa económica y predijo que Barro-Meis será en la práctica la primera plataforma logística de Galicia por su cercanía a Pontevedra y O Salnés, así como a los puertos de interés general de Marín, Vigo y Vilagarcía.

Cosa de «tolos»

El conselleiro visitó ayer el polígono de Barro-Meis, junto al presidente de la Diputación, Rafael Louzán y los alcaldes de la zona. Landín Eirín, regidor de Barro, le saludó como una de las personas que había contribuido decisivamente a su desarrollo por haber aprobado el plan de ordenación del municipio que posibilitó el nuevo parque empresarial. «Decían que estabamos tolos», indicó Landín, quien poco después lamentó que Xestur -la sociedad participada por la Xunta parta crear suelo- les hubiese dado con la puerta «nos fociños» a la hora de construir el polígono, antes de acometerlo la Diputación.

El alcalde de Barro no dudó en arremeter contra la delegada de Política Territorial, Isabel Domínguez, y se mostró muy molesto porque se diga que que el polémico nudo de Curro en la PO-531 se debe «única e exclusivamente ás necesidades do polígono». Por su parte, Rafael Louzán se congratuló de que la Xunta hubiese accedido a desdoblar el acceso desde la autovía de O Salnés a la AP-9 como había pedido en septiembre.