Miguel Ángel Gómez seguirá luchando hasta que los policías de la Udyco que lo detuvieron en el mes de septiembre sean castigados por lo que él considera una detención ilegal, y para que se le indemnice por los daños y las lesiones sufridas en el operativo en el que los agentes perseguían a un supuesto narcotraficante con el que confundieron al joven.
A este vecino de Meis no le echa para atrás la decisión del titular del juzgado número dos de Cambados, que decidió archivar su denuncia y la de Noelia González, la otra joven que denunció también su detención pese a que los agentes la estaban vigilando ya con anterioridad por su presunta relación con una organización criminal. De hecho, Miguel Ángel Gómez tiene pensado recurrir la resolución judicial, ya que considera que los policías se extralimitaron en su actuación y no quiere que otras personas pasen por unas circunstancias similares a las suyas.
Los hechos denunciados tuvieron lugar el pasado mes de septiembre, cuando los policías perseguían un coche en que supuestamente circulaba una persona que podría haber recibido una cantidad de droga. En el camino se cruzó Miguel Ángel Gómez con un coche similar, de ahí que los agentes lo confundieran con el presunto narcotraficante. Le dieron el alto pero el joven, asustado, huyó, por lo que los policías le dispararon al coche, emprendieron una persecución que incluso dio lugar a un choque entre los dos vehículos y, por fin, lo detuvieron, provocándole algunas lesiones en el forcejeo. Hasta una hora después en comisaría, los policías no se dieron cuenta de su error.
El juez de Cambados archivó las denuncias al considerar que los agentes habían actuado correctamente en el marco de un dispositivo policial.