Manuel Veiga, el anciano de 78 años que resultó herido de gravedad tras casi ser arrollado por un tren en el lugar de Paredes, en Vilaboa, ingresó en la noche del pasado martes en el Hospital Juan Canalejo, en A Coruña, para recibir una atención médica más adecuada a las lesiones causadas en el suceso. Según explicó una sobrina del hombre, el herido se encuentra lesionado en la espalda y la familia está preocupada por su evolución sanitaria. Al parecer, el accidente tuvo lugar cuando el anciano cruzaba la vía férrea en el tramo ferroviario conflictivo y al no poder eludir al tren que circulaba en dirección a Pontevedra. Como resultado del suceso, el hombre se cayó al suelo golpeado por el tren o por el aire causado por su paso.
Por su parte, el alcalde de Vilaboa, el socialista José Luis Poceiro, reiteró ayer que Adif mantiene la previsión de comenzar el vallado de un tramo de unos doscientos metros de vía férrea sin protección en Paredes. El regidor confía en que esta medida sirva para poner fin a la repetición de accidentes graves e incluso mortales en este tramo, que es uno de los más peligrosos de la provincia al contabilizar cinco muertos en los últimos sesenta años.