Tuvo que llevarse un susto, pero el Ourense cumplió con victoria y con goles una buena actuación en general en O Baltar, derrotando al Portonovo por 1-4. Los rojillos pagaron caro sus minutos de relajación en la primera parte. El equipo pareció dormido, incapaz de tener el balón y dejando espacios a un Portonovo que los supo aprovechar. Tras evitar in extremis Lucas la primera ocasión de los locales, llevada por Óscar Guimeráns, este envió un gran pase a Nel y el veterano jugador adelantó al Portonovo cuando habían transcurrido 25 minutos.
El gol en contra fue la espuela que necesitaba el Ourense para meterse de verdad en el partido. Lo consiguió con una dosis de fortuna, al lograr el empate Antonio cuatro minutos después tras cazar desde fuera del área una volea que metió por toda la escuadra. El Ourense resurgió entonces con toda sus fuerza y comenzó a dominar el encuentro con llegadas claras al contragolpe. A los 37 minutos, un disparo lejano de Gonzalo acababa como un balón muerto que no supo despejar la defensa local y Quintairos aprovechó el rechace para anotar el segundo tanto ourensanista. El tanto del nueve celanovés, en racha, abrió el camino para la sucesión de oportunidades que acabaron por dejar claro quién era el equipo superior.
Arenas avisó con un libre directo, Noguerol casi aprovecha la segunda jugada de un córner y Quintairos cerró la primera parte con un tiro cruzado que se fue fuera por poco. Fue demasiada artillería para un Portonovo que a partir de entonces casi dejó de existir. Arenas, Noguerol y Quintairos fueron los pilares -brillantes ayer- del acierto ofensivo de un Ourense que hizo del contraataque su arma predilecta.
El Portonovo tuvo la ocasión para empatar al regresar del vestuario en la segunda parte. El meta ourensanista Lucas Sierra esperaba un balón en la esquina del área y apareció Nel que casi se lo roba, aunque finalmente el portero rojillo resolvió la situación. Fue el momento que tuvieron los locales pero acabó en un simple susto.
Las oleadas ofensivas que protagonizaban Arenas, Noguerol y Quintairos eran continuas amenazas de gol. El delantero ponteareán, que alternó la banda derecha e izquierda con Peloto dejando a Noguerol detrás del punta, marcó el tercer gol rojillo, con un disparo escorado que introdujo por el primer palo.
El Portonovo concedía ya demasiadas facilidades defensivas y el Ourense pudo conseguir una goleada aún mayor. Xaime Noguerol pudo aumentar la cuenta tras picar un balón ante Javi Díaz, pero el esférico no entró a pesar de estar ya la portería descubierta. Peloto sí obtuvo el premio del gol a su esforzado trabajo anotando el cuarto gol de los rojillos, en una jugada personal que inició con una carrera por el carril central y que remató con un golpeo con el interior pegado al poste.
Fonsi Valverde comenzó a mover el banquillo. Dio entrada al debutante Capelo para sustituir a un tocado Quintairos. Capelo se situó inicialmente como punta, aunque luego pasó a la banda derecha. El lateral Sito cubrió el puesto de Gonzalo, al que el entrenador probó de medio centro, y Martín sustituyó al autor del cuarto gol.
Era el momento de probar y de dar minutos, pues la sensación era de total superioridad rojilla después de los momentos de mal juego de la primera parte. Con esta primera victoria como visitante, el Ourense deja atrás el mal comienzo liguero de Santa Comba y empieza a afianzarse como equipo importante de la Liga.