La Guardia Civil ha investigado 176 incendios desde enero

Marta Vázquez Fernández
m. vázquez OURENSE / LA VOZ

OURENSE

PABLO ARAUJO

Los agentes han arrestado o detenido a 24 sospechosos de provocarlos

02 sep 2012 . Actualizado a las 07:25 h.

De mayor o menor intensidad, los fuegos forestales son una realidad diaria en la provincia de Ourense. Indagar sobre sus causas y, si es posible, localizar a sus autores y llevarlos ante la autoridad judicial es responsabilidad de los agentes de la Guardia Civil que durante este año, desde el 1 de enero, han investigado 176 incendios.

Se trata de una cifra más alta que la de años anteriores aunque resulta significativo que una parte importante de los focos investigados por parte de los funcionarios del instituto armado -es posible que haya habido otros incendios de los que no se ha tenido conocimiento por parte de la autoridad- hayan tenido lugar entre los meses de enero y abril, una temporada que este año ha sido inusualmente virulenta y en la que los incendios llegaron a cobrarse la vida de un brigadista, fallecido en la extinción de un gran foco declarado en Castrelo do Val.

Así, y según datos oficiales, hasta el 1 de abril se habían investigado ya 110 incidentes, con un balance de hectáreas calcinadas que superaba ya las 4.000, según estimación de los servicios de extinción.

Quemas sin control

También ha sido más intensa la acción de las fuerzas de seguridad a la hora de detener a presuntos responsables, aunque la cifra de arrestos siempre es muy superior a la de focos debido a las dificultades que existen para investigarlos. Entre enero y agosto, los agentes han detenido o imputado a 24 personas.

En la mayor parte de los casos, se trata de agricultores o ganaderos que realizan quemas de rastrojos, en muchos casos sin haber obtenido la autorización, que terminan complicándose por la falta de medidas de seguridad. También en las últimas semanas se ha imputado a algunos trabajadores agrícolas a los que se acusa de haber causado fuegos forestales debido a la mala utilización de los vehículos o las herramientas. Y es que en época de calor y sequía la chispa de un tractor puede provocar un gran desastre.