Además, advierte al propietario de una multa de entre 60.000 y 300.000 euros
30 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La Xunta ha abierto un expediente a un vecino de Petín por la construcción de una vivienda ilegal. En el último documento recibido por Eduardo Murciego, se le encomia a reponer la legalidad en la finca, a través del derribo de la construcción; así como se le anuncia la posibilidad de una sanción económica que va desde los 60.000 a los 300.000 euros.
Es el último paso de un proceso que comenzó en 2009 con el primer expediente, en el que se reflejaba que la construcción estaba en suelo rústico. Además, se remarcaba que estaba a apenas 37 metros de la edificación más próxima, «incumprindo a distancia mínima de 100 metros a calquera outra edificación situada en solo rústico»; y que carecía de licencia municipal. Se trata de unos hechos que el propietario reconoce que se ajustan a la realidad, pero argumenta que «ya en 2003 cuando pregunté por las fincas el alcalde me dijo que al año siguiente se podría construir allí sin problema», dice Murciego. Así que, dice, basándose en esa afirmación fue que en 2004 comenzó las obras. En aquel momento asegura que lo que recibió desde el Concello fueron indicaciones de que el Plan Xeral de Ordenación Municipal (todavía sin aprobar) sería una realidad ese mismo año y que la finca pasaría a ser urbanizable.
De hecho, en un informe municipal que aparece en el segundo expediente enviado a Murciego (en 2010), se recoge que la parcela cuenta con acceso rodado público, abastecimiento de agua, aguas residuales y energía eléctrica, al tiempo que se encuentra en la malla urbana, por lo que se estaría en condiciones de pasar a ser suelo urbano. Pero esto choca con el informe de la inspectora urbanística, que dice que la obra no es legalizable por lo que, dice, procede ordenar su demolición. Finalmente, hace unos días llegó a Murciego el tercer escrito de la Xunta, en el que la Axencia de protección da legalidade urbanística le incoa un expediente sancionador como presunto responsable de una infracción urbanística muy grave. Ante esta situación, el hombre ha presentado un escrito en el Concello en el que pide al alcalde que «se implique e intente resolver el grave problema que yo tengo». Asegura no contar con dinero para hacer frente a la multa.