Retiran la acusación al presunto encubridor del crimen de Viana do Bolo

María Cobas Vázquez
maría cobas O BARCO / LA VOZ

VIANA DO BOLO

F.B.B. quedó libre de cargos después de que lo señalase Manuel Mouriño, autor confeso de la muerte de Montse

25 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Fernando B.B., el joven al que Manuel Mouriño, autor confeso de la muerte de Montse Martínez en Viana do Bolo en 2001, había señalado como encubridor, quedó ayer libre de todos los cargos. Fue después de que se celebrase una comparecencia en el juzgado de Trives en el que se establecieron los hechos, las acusaciones y las imputaciones que piden fiscal, acusación particular y defensa; y a la que asistieron tanto Fernando B.B. como Manuel Mouriño.

Fiscal y acusación coincidieron al solicitar el sobreseimiento de la imputación por falta de pruebas, «porque Manuel aseguró que había visto a Fernando cuando subió al parque, y que suponía que este lo había visto a él; pero que después del golpe ya no le vio», ahondaba su letrada, Pilar Pazos.

«No tengo ni idea, habría que preguntárselo a él», respondía Fernando B.B. a la salida del juzgado a la pregunta de por qué le había señalado Mouriño. «No tenía ningún motivo; no sé si para rebajar su pena...», indicaba. Eso sí, remarcaba que «por culpa de un asesino» había estado «diez meses sufriendo mucho, mucho, mucho».

«Se ha hecho justicia conmigo»

A pesar de todo, ayer decía estar «con una alegría tremenda» después de que «se haya hecho justicia conmigo». Terminaba así el proceso iniciado en abril, cuando Mouriño le señaló como encubridor y fue imputado. Desde entonces, ha tenido que fichar cada quince días.

Tras la comparecencia, se abre el período de formulación de acusación para que el caso se traslade a la Audiencia, donde se celebrará el juicio por la ley del jurado. Manuel Mouriño será el único imputado. Allí, la familia buscará que se le condene por asesinato. «El propio acusado dice que después del primer golpe no se cerciora si está viva o muerta. Entendemos que aprovecha la inconsciencia para arrojarla al vacío en una altura de cuatro metros, que entendemos que ahí no cabe discusión de que se produce la muerte. Ante la indefensión de la víctima por su estado inerte consideramos que es asesinato», argumenta el abogado, José Díaz.

El defensor de Mouriño, José M. Rodríguez, por su parte, defiende que se trató de un homicidio imprudente «porque no había ánimo de matar»; y añadía que si el joven ocultó el cuerpo fue porque tenía «la creencia total de que nadie le creería». Remarcó que procedía de una familia desestructura, con episodios previos de violencia.

El fiscal califica la muerte de Montse como homicidio.