Alternativas en la transformación de residuos urbanos

C. Paradela O CARBALLIÑO/LA VOZ.

OURENSE

Una empresa americana ofrece un sistema pionero para el sur de Galicia

12 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

«Un sistema pionero en el mundo de la transformación de residuos urbanos en combustibles y otros, con emisiones de CO2 de prácticamente cero y sin residuos finales, ya que aprovecha todos los componentes y los transforma». Es la oferta de Eladio Veleiro, un joven carballiñés y delegado para Galicia de la empresa Green Power Europa, que reivindica una «energía verde para un mundo mejor».

Un proyecto que, tras la preocupación y el rechazo generado en la comarca de O Ribeiro ante el anuncio de la instalación de la Sogama del sur entre las provincias de Ourense y Pontevedra, abre una nueva alternativa al tratamiento de los residuos y que el próximo miércoles se presentará a representantes de la Consellería de Medio Ambiente para su estudio.

Veleiro Fernández señala que este tipo de plantas de reciclaje y transformación de biomasa residual en combustibles y carburantes de alto rendimiento convierten toda la basura que entra en las instalaciones, «plásticos, productos orgánicos, derivados del petróleo, lodos, latas, hasta los neumáticos... todo, en combustibles». Un proyecto novedoso que es posible, puntualiza, al acelerar en ocho horas un proceso de descomposición que «llevaría millones años en la naturaleza en tan solo unos segundos», explica.

El funcionamiento de la planta, que ya ha despertado el interés de diversos concellos, mancomunidades y diputaciones de diversos puntos de Galicia, ya que para su puesta en marcha necesitaría recibir unas 200 toneladas de residuos diarios, daría trabajo directo «a unas 60 personas, ya que debe funcionar las 24 horas del día los 365 días al año», aclara.

Entre las ventajas que Eladio Veleiro destaca de este novedoso sistema en el que científicos americanos llevan trabajando quince años, dice, están la reducción de más del 90% de las emisiones de CO2 y además al ser un circuito cerrado los gases se transforman en un bien de consumo; trabaja con temperaturas y presiones considerablemente bajas, por lo que descarta la presencia de toxinas que son capturadas y neutralizadas por un catalizador. Además elimina los deshechos de mataderos, desbroces, podas, lodos para obtener a cambio bienes de consumo, genera combustibles de alto rendimiento, electricidad y agua, ya que es energéticamente autónoma. Además son plantas modulares por los que se pueden multiplicar según las necesidades.

Veleiro Fernández confía en que su proyecto sea aceptado y pueda ser una alternativa eficiente al tratamiento de residuos urbanos.