El alcalde considera prioritario centrar el debate en el trazado antes del futuro de la estación Empalme

La Voz

OURENSE

30 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Los grupos políticos municipales de Ourense ofrecieron ayer, al tiempo que se abre el plazo de exposición pública del proyecto, una inusual imagen de unidad en una corporación en la que se han sucedido en los últimos meses las broncas y enfrentamientos por muy diferentes motivos. Una llamada del alcalde, Francisco Rodríguez, a la que acudieron el popular José Luis Sousa; el socialista Demetrio Espinosa y el nacionalista Andrés García Mata, permitió al regidor hacer pública confesión de que «percibía boa disposición e boa vontade», que lo llevó a dejar ver que hasta es posible que se puedan llegar a hacer alegaciones conjuntas del Concello, si los tres grupos se ponen de acuerdo.

La designación de dos técnicos municipales, para que analicen el proyecto y hagan un diagnóstico, será el primer paso para un más amplio movimiento en el que, en palabras del alcalde, se podrá «convocar a representantes da sociedade ourensán» en atención a la importancia del proyecto.

Hizo hincapié Francisco Rodríguez, de todos modos, en la conveniencia de que sea el Concello el que lidere el proyecto urbanístico y de planeamiento que será necesario desarrollar entre Peliquín hasta O Pino, incluyendo la estación Empalme. Sin entrar en controversias acerca de la necesidad de que el AVE entre soterrano o en superficie, para el alcalde es fundamental acometer este asunto con unidad de acción. «É un proceso longo e debemos tentar superar a cuestión partidaria», propuso.

Anticipa cambios

El regidor y dirigente socialista anotó que de aquí al fin del proceso, contando como tal el de la estación, «haberá cambios de goberno, na Xunta, no goberno do Estado e no municipal» por lo que ve importante marcar objetivos claros por encima de diferencias.

Para el alcalde de Ourense, que ofreció su valoración sobre este asunto con posterioridad a la reunión con los portavoces de los tres grupos municipales, la cuestión de las vías soterradas es secundaria. Lo primero, cree él, es garantizar la «permeabilidade» entre los barrios de A Ponte y O Vinteún, separados desde que se hizo la estación Empalme. «Agora falamos do tramo e logo do deseño da estación», indicó.

Entiende el alcalde que si realmente Ourense apuesta por un proyecto de futuro, de transformación urbana, el Concello debería negociar con Renfe y con el Ministerio de Fomento la posibilidad de abrir modificaciones del planeamiento en estos terrenos, para logran el mejor uso en cuanto a edificabilidad, zonas verdes, equipamientos o zonas comerciales

«De igual forma que o ministerio paga o 100% do que estamos a falar, o que se faga na estación virá de algunha maneira determinado polas plusvalías que se xeneren coa modificación do planeamiento deses terrenos, que son os que lle han dar valor», admitió.