El Seminario Mayor perdió la mitad del alumnado en los últimos catorce años

El Seminario Mayor de Ourense se prepara para celebrar mañana la festividad de San José, en el Día del Seminario, que contará con la ordenación de tres nuevos diáconos, que se sumarán a los cuatro existentes en la diócesis. Con motivo de esta celebración se presentará la revista Seminare . En este curso estudian en el Seminario Mayor 23 alumnos que se preparan para ser sacerdotes. En relación al curso pasado la matrícula bajó en un alumno. Las estadísticas marcan un descenso que parece empezar en el curso 1990-91 cuando había 45 alumnos, cifra que bajó a 25 en el curso 1993-94 para subir a 43 en el 1997-98. El rector, Jorge Estévez, dice que tanto este seminario mayor como los demás «no remontan el vuelo. En el menor sigue habiendo gente que mantiene la esperanza. Menos mal que tenemos seminario menor». Al mismo nivel que Ourense están los seminarios Interdiocesano de Cataluña y el de Cádiz-Ceuta; el de Córdoba R.M. tiene 24 alumnos, el de Granada 25 y el de Ciudad Real, 26. En el contexto gallego el seminario mayor con más alumnado en el presente curso es Santiago, con 34, seguido de Ourense con sus 23 aspirantes a sacerdotes; Lugo con 18 y Tui-Vigo, con 13. Panorama español En España el seminario de mayor matrícula es el de Madrid, con 120 estudiantes, seguido del Colegio Internacional de Bidasoa, con 116. Toledo tiene 77, Getafe 83 y Sevilla 67 seminaristas mayores. En cuanto al Seminario Menor, el ourensano es también el segundo de Galicia con sus 102 jóvenes. Sólo le supera Compostela con 127. Lugo tiene 94; Mondoñedo, 40 y Tui-Vigo, 48. En el caso ourensano la matrícula creció en cuatro jóvenes más. En el resto de España el seminario menor más populoso es el de Getafe, con 198 estudiantes y luego el de Segorbe-Castellón, con 137. En el Mayor los alumnos aprenden desde antropología hasta teología, desde pedagogía a filosofía, griego bíblico, hebreo, derecho canónico, música, patrología, escatología, mariología, cristología, historia de la Iglesia, patrimonio, liturgia, sagradas escrituras, entre otras materias que aportan al alumno una importante formación humanística y espiritual. Estévez anima a los jóvenes ourensanos a enrolarse en los estudios eclesiásticos pero a todos les dice: «Independientemente de que quieran venir o no al Seminario, que se tomen siempre la vida en serio y que tengan momentos de silencio para escuchar a Dios. Así a lo mejor llega la vocación».

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