The Cynics rinden tributo al Rock Club de Ourense

Javier Becerra
javier becerra REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

El próximo álbum del grupo norteamericano incluye una canción dedicada al singular ambiente de la sala gallega

05 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Difícilmente podría recibir la sala Rock Club un homenaje mejor. The Cynics, para muchos la mejor banda del revival garajero de los años ochenta, incluirá en su próximo álbum, Spinning Wheel Motel, un tema con el título Rock Club. La canción hace mención al particular ambiente que se cuece en la sala ourensana, una de las grandes referencias de los sonidos de garage en España.

Así lo ha confirmado el guitarrista y fundador de la banda, Greg Kostelich, en la presentación del álbum que hizo para el programa El sótano de RNE-3. Greg explicó que la letra de la canción la escribió Michael Kastelich, el carismático vocalista de la banda pensando en «el club de Labra». Labra es el responsable de la programación del local que enamoró a los americanos de tal modo que lo han incluido en casi todas sus giras nacionales. «La canción habla de estar en el Rock Club, de todo lo que la gente hace ahí, de que da igual quién seas y lo que hagas», explicó Greg en la presentación. El álbum se pondrá a la venta el próximo mes de abril y, teniendo en cuenta que han escrito un himno a medida de la sala, lo lógico es que se deberían dejar caer de nuevo por una tierra en la que se les adora.

Una banda clásica

Procedentes de Pittsburgh (Pensilvania, Estados Unidos) The Cynics debutaron en 1986 con Blue Strain Station, un disco que miraba abiertamente a los años sesenta, buscando la energía de las bandas de garage en plena década de sobreproducciones. Su gran hito llegaría en 1989 con Rock n? Roll, su mejor obra y uno de los trabajos indispensables del género. Con este trabajo se hicieron muy populares en los círculos underground nacionales, hasta el punto de incluso grabar en 1994 un directo en España.

En Ourense su primera visita se remonta a los primeros noventa. Desde entonces, enamoraron a un público devoto de sus píldoras de menos de tres minutos.