El PSdG exige la rehabilitación urgente del castro de Baroña

Javier Romero Doniz
JAVIER ROMERO NOIA / LA VOZ

CULTURA

Los socialistas piden una partida para frenar el deterioro del yacimiento

16 feb 2011 . Actualizado a las 01:43 h.

Pocos agentes políticos, culturales o sociales quedan en Galicia que no hayan manifestado ya su deseo de que el Gobierno gallego desbloquee la rehabilitación del castro de Baroña, que desde hace 14 años se encuentra paralizada. Tras las declaraciones realizadas por el alcalde socialista de Porto do Son, Pastor Rodríguez, quien no dudaba en calificar esta situación como una «batalla partidista» por parte de la Xunta, que «discrimina o xacemento por motivos políticos», ahora, su partido se ha sumado a esta cruzada para blindar de manera urgente uno de los mayores tesoros del patrimonio gallego, que en la actualidad cuenta con seis zonas en estado catastrófico.

Para ello, el PSdG se ha valido de una proposición no de ley que el diputado noiés, José Manuel Lage Tuñas, presentó ayer en el Parlamento gallego: «Demandamos do Goberno galego que dedique unha partida orzamentaria ao coidado, restauración e protección do Castro de Baroña, patrimonio de todos os galegos e galegas, e que está sufrindo un serio deterioro pola inacción da Xunta de Galicia, que é a Administración competente en materia de protección do patrimonio cultural».

El tortuoso proceso BIC

La segunda de las demandas que el parlamentario plantea a la Administración de Feijoo es la conclusión en el 2011 de la tramitación del expediente para declarar bien de interés cultural (BIC) el asentamiento sonense. Algo que, por otra parte, en San Caetano ya han confirmado, pero sobre lo que cabe decir también que empezaron a hablar al principio del mandato, en mayo del 2009, sin que hoy se conozcan avances.

Si en una cosa coinciden tanto socialistas como populares es en la conveniencia de declarar BIC el castro para poder optar a las ayudas del Gobierno central. Pero en lo que difieren es en la urgencia de aportar capital para frenar el avanzado deterioro del castro. Sobre todo, antes de que comience la temporada estival, que es cuando el castro registra el mayor número de visitantes y para erradicar una moda que desde hace dos años se ha generalizado entre los turistas, y que consiste en el aprovechamiento de las piedras del entorno para crear de forma improvisada estatuas.