La muestra «A message for you» homenajea al fotógrafo francés Guy Bourdin

EFE

CULTURA

Entre las imágenes seleccionadas, se pueden ver las famosas instantáneas que hizo para la revista de moda «Vogue» en su edición francesa.

14 oct 2010 . Actualizado a las 10:45 h.

La exposición fotográfica «Guy Bourdin: A message for you», que se podrá ver en Madrid desde mañana, rinde homenaje a la trayectoria profesional de este fotógrafo francés que, por su carácter rompedor y provocador, se convirtió en uno de los artistas «más influyentes» del siglo XX.

Esta muestra, la primera del artista en España, está comisariada por la historiadora Shelly Verthime y se podrá ver en la Sala del Canal de Isabel II desde mañana hasta el próximo 9 de enero.

«Con esta exposición, la Comunidad de Madrid quiere conmemorar el vigésimo aniversario del fallecimiento de uno de los fotógrafos más importantes e influyentes de los últimos años del siglo XX», ha explicado hoy el vicepresidente y consejero de Cultura y Deporte de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.

«Fue -ha añadido- un artista que rompió con las convenciones del momento y marcó la tendencia de lo que hoy es la fotografía en el mundo de la moda y de la publicidad».

«A message for you» reúne 75 fotografías -algunas de ellas inéditas-, que Bourdin (1928-1991) tomó a su modelo fetiche, Nicolle Meyer, durante los años setenta, el periodo más creativo de su carrera, y que marcaron un punto de inflexión en la historia de la fotografía de moda.

«Bourdin me descubrió cuando comenzaba mi carrera como modelo. Era muy supersticioso y me pidió mi carné de identidad para ver mi fecha de nacimiento. Afortunadamente mi signo astrológico satisfacía sus demandas y trabajamos juntos durante muchos años. Fue un viaje maravilloso para mí, lleno de recuerdos», ha confesado hoy la modelo.

Entre las imágenes seleccionadas, se pueden ver las famosas instantáneas que hizo para la revista de moda «Vogue» en su edición francesa o las campañas que llevó a cabo para la firma de calzado Charles Jourdan.

La exposición también deja al descubierto la obsesión del artista por incluir una fotografía dentro de la propia fotografía, un procedimiento que toma de la obra del pintor británico Francis Bacon y con el que transmite la sensación de angustia silenciosa, según el catálogo de la muestra.