TOCA PONERSE LAS PILAS... coger los apuntes y estudiar. Podría pintarlo mejor pero es lo que hay con los exámenes a la vuelta de la esquina. No todo está perdido, sí hay algunas cosas que puedes hacer para que el temario entre mejor en tu cabeza, esté a gusto y se quede.
03 jun 2017 . Actualizado a las 05:35 h.No te hagas el remolón porque estamos en junio y toca sí o sí ponerse las pilas. Si llegas con los apuntes a limpio y ligeramente ordenados tienes mucho camino recorrido, pero no cantes victoria, te queda cruzar la meta. Cuesta, lo sé, el verano está ahí fuera, los días son más largos, y la playa grita tu nombre. Pero es hora de hincar los codos para poder disfrutarlo como es debido, y sin castigos o pasantías de por medio. Coge tus bártulos, siéntate con los apuntes delante y concéntrate. Lo sé, la atención no es infinita. Pero los expertos, como la psicopedagoga Ana Pravia, aseguran que unos 30-40 minutos del tirón sí que aguanta. Y hasta permite descansos. No más de 10 minutos.
Lo primero que debes hacer es leer lo que tienes que estudiar de manera comprensiva. Es decir, que si no entiendes algo preguntes al profesor o busques en el diccionario. Ahora toca estructurar, lo que viene siendo subrayar. «Es bueno que cada uno tenga su código de colores, da igual cuales, pero sí hay que hacer distinciones e ir de lo más general a lo más concreto, por ejemplo, azul para los títulos, verde para los subtemas, y lápiz para las palabras clave», explica Gemma Rasa, profesora de psicotécnico C-Formación de Vigo.
A partir de aquí está todo el pescado vendido, hay que empezar a repasar primero con las ideas básicas y con tus propias palabras (bien en voz alta o en esquemas) para ir añadiendo poco a poco conceptos y un lenguaje más específico. Te podría decir que esto es todooo amigoosss, pero si estás en secundaria o bachillerato a este esquema tienes que darle una vuelta de tuerca. «En primaria, los textos de los libros ya vienen estructurados, pero en secundaria no, hay que hacerlos, al igual que en bachillerato, donde ya no vale usar tus palabras sino un vocabulario de adulto», dice Ana Pravia.
Hay que ser realista, lo que mejor funciona es ir al día, la memoria de repetición dura lo mismo que un whisky on the rocks, y como explica Gemma, «no es aconsejable eso de repetir y repetir un párrafo», lo que viene siendo chapar porque como te atranques en una palabra...
Este sistema es apropiado cuando por delante tienes un examen de desarrollo, porque si es tipo test lo mejor que puedes hacer es practicar, practicar y practicar. Y si antes la comprensión era importante, ahora es esencial, porque un DE o un QUE pueden cambiar totalmente el significado. Antes de hacer la quiniela, entérate bien de las reglas del juego. Porque no es lo mismo que penalice el error que dejarla en blanco. Y ante la duda... acaba de leer el YES y pégale otro repasito, que no te viene mal.
5 CONSEJOS A TENER EN CUENTA
Si toca vocabulario...
Estás de enhorabuena. Puedes incluso aplicar, como dice Gemma, memorizadores que se usan en los concursos de memoria para entrenar el cerebro. Por ejemplo, con reglas nemotécnicas para buscar la asociación y recordar la palabra con otra que se parezca mucho.
Las mates: constancia
Primero hay que resumir la teoría de forma que quede sencilla y cómoda para poder echar un vistazo en un momento dado. Recomiendan hacer dibujos con los problemas, y llevarlas al día para no descolgarte. «Una vez comprendida la fórmula, hay que hacer muchos ejercicios con la misma base», dice Gemma.
Listas para english
Si toca vocabulario de un idioma extranjero lo mejor que puedes hacer son listas, incluso por campos semánticos, y sobre todo acotar, no intentar abarcar demasiado. Puede ayudar hacer postalillas para jugar a identificar con imágenes. Como si fuera el Trivial.
¿Planning?
Los expertos recomiendan intercalar asignaturas y hacer descansitos cada 30-40 minutos para no perder la concentración. Pero de 10 minutos como máximo, más no, que entonces desconectamos.
¿El truco?
Aunque tus ojos hayan venido directamente hacia aquí, siento decirte que no lo hay, como mucho lo que nunca falla, que es constancia y comprensión.