Tres vestidos eran demasiados

Silvia Ramos

YES

INTERNET

ERA VISTO... 20 de junio del 2015. Quédate con esta fecha. A escasas semanas de la boda, YES anunció que no era oro todo lo que relucía en ese amor de excesos. Si es que dime de qué presumes...

25 jun 2016 . Actualizado a las 05:43 h.

Es increíble. Tuvo a toda España al borde de la náusea durante el último año pero, al parecer, ella fue la última en enterarse del raquetazo que estaba por venir. Alba Carrillo, de blanco impoluto y rictus descompuesto cual virgen de Lourdes, anuncia a golpe de portada y previo pago que su Feli -que por lo visto no era tan feliz como ella lo pintaba- le pidió el divorcio «de manera fría y distante». Si es que no podía ser. Tanto bodorrio, tantos vestidos -hasta tres se puso- y tanto selfie solo podían acabar así, con una separación a los once meses de matrimonio. Toma bomba. Feli, tal y como estaba previsto, salió por patas una vez más. Quita, quita. Mejor así que gastar en el regalo de aniversario. Que si hay que ir, se va, pero ir pa ná... Lo que no se le puede achacar a ella es que no sea consecuente. Las cosas como son. Porque la repercusión de su exclusiva para vender el divorcio es directamente proporcional a la que montó retransmitiendo primero los preparativos de la boda, y después simulando la imagen de matrimonio perfecto ávido de Me Gusta. Ahora resulta que la cosa viene de atrás. Que las fotos de Miami en las que su Feli disfrutó de la noche con su prima la de Cuenca sí que tenían importancia. Que hace lo menos seis meses que no eran felices. Que ella vivía en un drama en el que no se sentía apoyada. Y mientras, dientes y más dientes de cara a la galería. Dios, si existes solo te pido una cosa: que el fin de esta historia sea rápido e indoloro. Ya hemos tenido bastante con el principio.

HISTÉRICA E HISTRIÓNICA

Hace un año, concretamente el 20 de junio del 2015, avisamos. También lo hizo la Universidad londinense de Brunel, que elaboró un estudio que concluye que aquellas personas que exhiben constantemente sus relaciones presentan cuadros de baja autoestima y vanidad. Ojo al dato. El psicólogo Manuel Lage opina lo mismo. Es más, considera que la de Alba Carrillo es una personalidad que encaja con la de alguien con un trastorno histriónico, antiguamente conocido como histérico. Estas personas, indica el experto, “tienen tendencia a la representación de un papel, a la teatralidad y a la expresión exagerada de las emociones. Además, presentan sugestibilidad, facilidad para dejarse influir y una afectividad volátil y superficial”. El especialista no termina aquí y describe más rasgos que le encajan con Alba: “Estas personas tienen la necesidad imperiosa de desarrollar actividades en las que sean el centro de atención, con un comportamiento y un aspecto marcados por un deseo inapropiado de seducir debido a su necesidad de reafirmarse ante sus inseguridades. Por eso tienen una preocupación excesiva por el físico, indulgencia para consigo mismos y una conducta manipulativa constante”, asegura. Aún así, Feliciano tampoco es lo que se dice un corderito. Su currículo, conocido por todos, es el que es. Alba no es la primera, ni la segunda. Tampoco será la última.Por eso esto no debería de haberle pillado por sorpresa, que cursi es un rato, pero cuesta creer que tuviese la venda tan bien atada como para no ver una realidad tan obvia. Juicios aparte, el terapeuta lo tiene claro: «El que es feliz de verdad es más celoso de guardar esa felicidad». Vamos, que todos esos pedorros que te inundan el Facebook con su eterna luna de miel suelen ser un fraude. El común de los mortales preferimos vivir esos momentos a restregárselos a los demás.