PUES SI TE PINCHA... TE HACES BUENO Es uno de los superhéroes que ha creado la imaginación de los más pequeños. Esta vez han superado la ficción que vende la gran pantalla. ¡El superpoder de la creación es suyo! A ver si Supermán se atreve con el Hombre Lengua o la Natural Woman...
04 jun 2016 . Actualizado a las 04:00 h.Confieso: estoy hasta el gorro de Superman, Spiderman, Ironman... y algún «man» más de la factoría Marvel y otras. Me pierdo. No sé en qué capítulo vamos de la saga, cuántos «versus» quedan o si, como le pasó a El hombre de acero que perdió sus calzoncillos rojos en la versión modernizada, podremos ver en un futuro no muy lejano a un Hulk rosa o a Thor con escoba en vez de martillo. No tengo nada en contra de ellos, ojo, pero los tengo en la sopa, el café, el té de las cinco... Como la creatividad infantil no conoce límites, comprobamos a través de los ojos curiosos de varios niños que existe un mundo paralelo de superhéroes y superheroínas. Haberlos hailos. Viven en la mente de los peques. Con voluntarios y los de un taller reciente del Centro Pedagóxico MauMarela de Ribadeo hicimos la prueba... no del algodón, sino de la imaginación. Con lápiz y papel y pinturas los idearon, dibujaron y les dieron poderes.
HÉROES MUY NATURALES
Tomaron forma, jugando con los elementos de la naturaleza y un sentimiento eco-friendly, el «hombre-lengua», el «hombre-fuego», el «pinchomán», la «súper serea», el «hombre-delfín», una «reina del hielo» menos disneyzada que Frozen, la femenina y singular «natural woman», el «hombre-piedra», etcétera... Carmela (7 años) es la autora de la «superserea» y nos explica el por qué de su dibujo, tan acuático: «Gustaríame ser serea para andar todo o día na auga. Sei nadar moi ben e teño moitas gañas de ver o que hai no fondo do mar. Dende a miña casa véxoo». El «hombre-fuego» es creación de Roque (5 años): «Me gusta porque hace fuego para matar a los malos, pero él no es un supervillano... ¡Y vive en Nueva York!». Existe otra versión similar, de Aitor (7 años), pero el suyo «vuela con fuego y lanza fuego, para hacer formas y cosas». Lluna (7 años) plasmó en un folio el «hombre-lengua». Yo pensé que sería un crac en comunicación pero «¡no! enrolla personas, a las que son malas», aclara. Otro que igualmente reconvierte a seres humanos con maléficas intenciones en buenos buenísimos es «Pinchomán». Lois (4 años) comenta de su personaje: «Si te pincha te haces bueno». Sencillo, simple, indoloro y mejora karmas.
Guillermo Hernández, responsable del área de formación de MauMarela, explica el fin del taller: «Queríamos que non se concentraran na parte masculina, senón no xénero que hai en todo e animámolos a desenvolver outros poderes que podían ser interesantes para o mundo. Nicole inventou unha superheroína que lanza corazóns para repartir cariño. Eles absorben o coidado da natureza. É interesante o que sacan». La propuesta final fue un superhéroe colectivo que quedó en un garabato descomunal, «supergarabato». «Si, é que o mundo está moi liado hoxe», reconoce Guillermo. «Se o vísemos os adultos coma os nenos...», dice. La tarea sirvió para que los menores observen «problemas que hai ao seu arredor, busquen solucións con respostas novas e sexan capaces de pensar de xeito diferente, porque é o que van a necesitar o día de mañá». En MauMarela, añade, también imparten robótica, diseño e impresión 3D, filosofía para niños y clases de habilidades sociales.
Cuando iba yo al cole tenía que pasar delante de la casa de O Letrumán. Creo que era el apodo de un electricista, pero ahora me pregunto si realmente sería un superhéroe con poderes para rebajar la disparada factura de la luz.