El Coruxo se reencuentra con la victoria goleando al Ourense

OURENSE CIUDAD

Los vigueses, que fueron muy superiores en el primer tiempo, se impusieron 3-0

24 mar 2014 . Actualizado a las 01:12 h.

Curiosamente, el día que el Coruxo se dejó los delanteros en la banqueta, regresaron los goles verdes. Y los puntos. Y las buenas sensaciones. Porque el fútbol que la lluvia había borrado en los de vigueses volvió de golpe para anular al Ourense en un partido que reengancha a la vida a los de Rafa Sáez, que ayer comenzó a ganar el partido con su planteamiento.

El técnico dio un giro al equipo apostando por sentar a los delanteros y colocar a Mateo en el frente de ataque. La movilidad del redondelano pilló con el pie cambiado a la defensa ourensana, que se vio claramente superada desde el minuto uno. El Coruxo, con su fútbol de toque, el balón a ras de suelo, los pases filtrados y las jugadas a balón parado machacó sin piedad a un Ourense obligado por las bajas a reconstruirse y que en el minuto ocho encajaba su primer gol. Antúnez sacaba en corto un córner para Pedro Vázquez, y este, viendo la llegada de Moscardó, retrasaba el balón para que el centrocampista se apuntase un golazo.

El partido pintaba bien para los verdes, pero estos, conscientes de los males del pasado, no se relajaron. Al contrario, se mantuvieron fieles a un fútbol ofensivo y ambicioso, y en el minuto 21 el Ourense vio cómo el colegiado le salvaba los muebles al anular por fuera de juego un gol de Mateo, que marchaba en posición correcta. Un remate cruzado del de Redondela que se fue cerca del poste y un balón raso que Centrón estrelló en la madera daban muestra del homenaje ofensivo que se estaba dando el Coruxo.

El segundo, antes del descanso

Los verdes estaban indultando a un Ourense superado en todas las líneas, y que apenas había inquietado a Fernando. De ahí que no extrañase que en el minuto 33 llegase el segundo tanto de la tarde. Cristóbal se encargaba de ejecutar con maestría una falta directa que Pato no lograba frenar. La definición y la efectividad que los vigueses habían echado en falta en tantas ocasiones, estaba de vuelta.

Para colmo, nada más encajar el segundo gol Luisito se veía obligado a retirar del césped a Pablo Corzo y Moisés, lesionados, entrando Óscar Martínez y Rubén Ace para suplirlos e intentar revitalizar a su equipo. No le funcionó, sin embargo, y la primera mitad se consumió sin reacción visitante.

Al regreso de vestuarios, y con Noguerol ingresando también en el campo, el Ourense apretó los dientes en busca de la remontada. Sin embargo, fue el Coruxo el que sentenció. En el minuto 50 el centro del campo vigués robaba un balón en la medular que llegaba a los pies de un hiperactivo Pedro Vázquez, que viendo la llegada de Mateo, habilitaba al de Redondela para que marcase el tercero de los verdes, premiando así además el excelente trabajo del atacante. El 3-0 fue una losa definitiva para el Ourense, que aunque intentó maquillar el marcador, no encontró la fórmula. La defensa viguesa estuvo a un altísimo nivel, y prueba de ello es que la portería quedó a cero.