Los trabajadores han arrancado hoy con movilizaciones y sopesan tener concentraciones a diario ante la sede de Valoriza
19 jul 2017 . Actualizado a las 17:09 h.Delegados del comité de empresa de Valoriza, concesionaria en Vigo del servicio de mantenimiento de parques y jardines, han iniciado hoy una campaña de movilizaciones en la que han reclamado refuerzos en la plantilla y menos horas extra.
La concentración ha tenido lugar ante la sede de la empresa y tendrá continuidad el jueves, aunque el comité de empresa sopesa celebrarlas a diario hasta que la dirección atienda a sus demandas.
Los trabajadores denuncian la negativa de la dirección de Valoriza de aportar la información económica, de absentismo o de contratos solicitada por el comité de empresa, así como la «cesión ilegal» de un conductor de un camión al Ayuntamiento de Poio, donde esta empresa tiene la concesión del servicio de basuras.
Entre el trasvase de trabajadores y los turnos de vacaciones, el presidente del comité de empresa, Alfredo Filgueiras, calcula que de los 110 empleados de Valoriza en estos momentos se encargan del mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad cuarenta trabajadores o incluso menos.
A la concentración de hoy se ha acercado el grupo municipal del PP, cuya portavoz, Elena Muñoz, ha criticado al gobierno local por «obligar» a los trabajadores a «salir a la calle para defender sus derechos».
Muñoz ha censurado que el gobierno local les haya «cerrado la puerta» tras «muchos meses padeciendo un contrato mal hecho» y de cambios de concesionarias. «Así no se trata a los trabajadores, ni se juega con su futuro», ha proclamado.
El edil popular Miguel Fidalgo ha responsabilizado al concejal Ángel Rivas y al alcalde, Abel Caballero, de la sucesión de acontecimientos en torno al contrato de parques y jardines durante los dos últimos años y medio.
Ha rememorado que en ese tiempo ha habido tres paralizaciones del concurso, otras tantas huelgas e igual número de cambios de concesionaria.
Las consecuencias, ha recalcado, son las zonas verdes de la ciudad «abandonadas», mientras el gobierno local «pasa de todo», y ha insistido en reclamar la convocatoria de un nuevo concurso.