Notario de profesión, el intelectual fue presidente del Consello da Cultura Galega y de la editorial Galaxia, además de miembro de la Fundación Penzol y fundador del Ateneo de Pontevedra
28 jun 2017 . Actualizado a las 13:06 h.Alfonso Zulueta de Haz falleció ayer en Vigo a los 92 años. Con su marcha, la ciudad y Galicia pierden a uno de sus pilares culturales. Notario de profesión, fue presidente del Consello da Cultura Galega, de la editorial Galaxia y del Consejo Social de la Universidad de Vigo, así como impulsor del Ateneo de Pontevedra, entre otros muchos cargos. De hecho, la mayor parte de su vida se centró en impulsar las instituciones culturales y en promover de acciones cívicas y sociales. Perseverante en la protección de las personas con discapacidad, también fundó y presidió la Fundación Gallega para Minusválidos Psíquicos Sálvora.
Zulueta de Haz mostró en los útlimos años preocupación por la grave crisis de valores de la sociedad actual y pensaba que solo podría salvarnos una auténtica aristocracia del espíritu frente al egoísmo arrogante de los poderosos que nos dominan, tal como señalaba en su día su amigo Xaime Isla Couto.
En el año 2007, con motivo de su ingreso en el Instituto de Estudios Vigueses, señaló en su discurso que "la cultura no es un adorno, sino un poder impresionante". Es lo que pensaba. Y es que Alfonso Zulueta hizo notar lo mucho que había cambiado el concepto de cultura que, lejos de ser propio de una élite, pertenece a la sociedad, ya que lo abarca todo: costumbres, ideas, creencias... Y aprovechó para reivindicar una mayor dotación de bibliotecas en la ciudad más poblada de Galicia. En el 2013 le fue concedida la Medalla de Oro de Galicia por la trayectoria de toda una vida.
Hace tres años protagonizó el que quizás fue su último gran acto público. Con motivo de su 90 cumpleaños, recibió un sentido homenaje de amigos e instituciones en la Fundación Penzol, de la que formaba parte. “Con tanto eloxio, había veces que pensaba que se referían a outra persoa”, dijo con retranca y emocionado. En esa ocasión tuvo la oportunidad de recordar a algunas insignes figuras galleguistas con los que colaboró, como Francisco Fernández del Riego u Otero Pedrayo.
Alfonso Zulueta de Haz deja un ingente trabajo social y, sobre todo, cultural. Por la obra "máis fermosa" que acometió en su vida, según sus propias palabras, fue la traducción al gallego de la Biblia, a la que dedicó doce años.
Mañana, tras un acto en la capilla a las 12.00 horas, será enterrado en el cementerio vigués de Pereiró. Los funerales tendrán lugar a las 20.00 horas en la iglesia de Los Apóstoles.