El Concello de Vigo adjudica la instalación de cintas transportadoras en Gran Vía

manu otero VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Iria Riveiro

La primera fase del proyecto dispone de un presupuesto de 121.000 euros

30 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Recorrer la Gran Vía de Vigo a pie va camino de dejar de ser una prueba de fortaleza física para convertirse en un agradable paseo. El Concello anunció ayer la contratación provisional de lo que definen como «la gran transformación» de esta calle consistente en la instalación de cintas transportadoras que facilitarán el tránsito de peatones entre la calle de Urzáiz y la plaza de España.

El primer paso será la instalación de estas cintas en el tramo que discurre entre las calles Lepanto y Nicaragua. Una distancia de setecientos metros cuya exigencia física descenderá de modo notable con la instalación de estos mecanismos. «Es una transformación histórica, la Gran Vía tiene una pendiente del nueve por ciento, es una zona dura pero estamos tan acostumbrados a subirlo que ya parece que no cuesta», dijo el regidor vigués Abel Caballero que anunció ayer la contratación del proyecto.

De su ejecución se encargará la empresa Iceasa Constructores que se adjudicó el proyecto por un valor de 121.000 euros. Aunque el conjunto de la obra, que transformará toda la vía cuenta con un presupuesto total de 8 millones de euros.

Esta revolucionaria obra permitirá llegar a pie a la plaza de España desde el cruce con Urzáiz en solo dos minutos y medio. Actualmente son necesarios unos diez minutos para llegar a la fuente de los caballos a pie. «Si contamos las paradas, es más rápido que el autobús», apuntó un Caballero que no concretó los plazos de ejecución de los trabajos, aunque está previsto que comiencen este año.

El tramo bajo de la Gran Vía, de unos 800 metros de longitud, contará con cuatro tramos de rampas mecánicas cubiertas, por lo que los peatones estarán también resguardados de la lluvia, y una plaza a la altura del Corte Inglés.

Este plan, que deberá ser completado con una segunda fase de acondicionamiento para facilitar el acceso a la plaza de España, está encuadrado en el programa Vigo Vertical. Un conjunto de reformas urbanas que contempla diferentes proyectos destinados a salvar los desniveles de la ciudad para facilitar la movilidad de los vigueses y en especial de aquellos colectivos, como personas con movilidad reducida o ancianos a los que les resulta más complicado ascender pendientes como las de Gran Vía u O Castro, una zona en la que también se esperan actuaciones de este tipo.

Otro de los trabajos que se ejecutarán bajo el paraguas Vigo Vertical, para cuya ejecución cuentan en el Concello con fondos europeos, es la creación de una gran plaza peatonal en Porta do Sol para lo que se transformará el párking del subsuelo en un túnel que captará todo el tráfico que atraviesa a diario la calle Policarpo Sanz. Mientras tanto, en la superficie los vigueses disfrutarán «de la gran plaza peatonal», anunciaba el alcalde hace unas semanas en alusión al espacio entre Urzaiz, Príncipe, Porta do Sol hasta conectar con el casco vello.