UGT intenta soldar el sindicato en Vigo con un candidato de consenso tras 4 años descabezado

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

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Ernersto Fontanes encabeza la única candidatura

19 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El 2 de junio es el día elegido por UGT para hacer el punto y aparte que los afiliados de la comarca de Vigo llevan esperando casi cuatro años. Es el tiempo que el sindicato lleva descabezado. La dirección de Galicia, esgrimiendo que se habían producido irregularidades, disolvió el 9 de octubre del 2013 una ejecutiva que apenas llevaba once días en el cargo. El enfrentamiento con Santiago fue de tal calibre, que tardaron meses en nombrar una gestora. Mientras, la agrupación con más afiliados de la comunidad, recibía cada día órdenes desde la capital, que había exigido las llaves del despacho.

En un ambiente tan enrarecido -«el agravio con Vigo ha sido muy grande», denunciaba el secretario general cesado-, nadie en la central se atrevía a vaticinar cómo y cuándo se escribiría el final de la historia.

La fractura era de tal calibre -en parte se dirimió en los tribunales- que hasta el verano del 2014 no se dio el primer paso hacia la pacificación con el nombramiento de una gestora en la que estaban representadas todas las federaciones comarcales con Domingo Barros al frente, un hombre de paz llegado desde Santiago.

Desde entonces ha sido necesario templar muchas gaitas en reuniones sin fin hasta dar con el candidato de consenso capaz de restañar las heridas. Al final, será Ernesto Fontanes la persona que recibirá la encomienda de soldar el sindicato.

Aunque los estatutos de la central contemplan que hasta el mismo día del congreso (2 de junio) pueden presentarse candidaturas, parece que la suya será la única. Las distintas federaciones (tres desde el reciente proceso de fusión) están de acuerdo en que Fontanes es la persona adecuada para ocupar la secretaría comarcal y poner fin a una situación de interinidad que, sobre todo de puertas afuera, está dañando mucho a la organización. «Llega en el momento preciso», asegura un militante veterano.

Ernesto Fontanes tiene una larga hoja de servicios en el sindicato. Procedente del sector de la banca, ha ocupado varios puestos de responsabilidad en la central desde el año 1994, el último de ellos el de secretario general de la federación de servicios en Galicia. «Vale la pena luchar por aquello en lo que crees. Decidí dar un paso al frente porque me encuentro con fuerza y con ganas. Eso es lo que me ha decidido además, claro del consenso», afirma

Cierre de ciclo

Dice que las cosas que un día se rompieron «forman parte del pasado» y que su intención es crear una «base sólida de unidad con unos objetivos bien definidos. Se cierra un ciclo y se abre otro», afirma.

Prefiere esperar al congreso para exponer a los compañeros antes que a nadie las líneas de trabajo que pretende seguir y explicar cuáles van a ser sus prioridades, pero avanza que va a emplearse a fondo en escuchar a la militancia.

El hecho de que Vigo, con más de 12.000 afiliados, sea la ciudad gallega que más masa crítica aporta al sindicato, no solo no pasa desapercibido en Santiago, tampoco en Madrid. De hecho, entre los invitados que se espera que asistan al congreso el próximo 2 de junio está el secretario general del sindicato a nivel nacional, Pepe Álvarez.

Ese día la gestora de consenso que se nombró en julio del 2014 cederá un testigo al equipo de Ernesto Fontanes, que alguno de sus siete integrantes ha llegado a decir que «pesa como una losa».