Más Marco

Jorge Lamas Dono
Jorge Lamas EL ÁTICO

VIGO CIUDAD

10 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

E n esta tragedia que se avecina, no hay buenos, salvo los propios empleados del Museo de Arte Contemporánea de Vigo. No hay buenos porque el alcalde sitúa el dinero como baremo para marcar la dirección del barco, aunque este navegue razonablemente bien desde su botadura. No hay buenos porque el Partido Popular, desde la Xunta y el Estado, presionaron a Abel Caballero a través de la reducción de sus respectivas aportaciones a la fundación. Y no hay buenos porque la Diputación de Pontevedra dio la espalda al primer museo de Vigo. En este caso todavía se presenta mucho menos bueno que el resto porque cuando la rectora actual estaba en la oposición se quejaba de las faltas de apoyo de Louzán y compañía. Una vez en el palacio provincial, si te he visto, no me acuerdo.

Así que todos los amantes del pensamiento libre y del Marco como foco de reflexión estamos con los músculos tensionados, esperando el tortazo. Sí sabemos de dónde va a venir, pero no sabemos la intensidad del mismo, solo sabemos que quien paga manda. Espero que este axioma no se haga extensivo a otras facetas de la vida porque si no retrocederíamos a los momentos anteriores a la proclamación de los derechos humanos.

Reflexionen todos. La ciudad necesita elementos de respeto exterior, que además son avalados por la ciudadanía con sus números de visitas. No digo que todo no sea revisable, pero desde la profesionalidad y la transparencia. Un concurso público determinaría el mejor candidato para seguir comandando este buque, que curiosamente zarpó el día que se hundía el Prestige. Qué no sea premonitorio.