La sala de autopsias se trasladará desde el obsoleto Nicolás Peña al anexo del antiguo Hospital Xeral

l.c. llera VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

25 abr 2017 . Actualizado a las 23:18 h.

El nuevo edificio de la Cidade da Xustiza no tendrá sala de autopsias, pero estas se realizarán al lado, en un anexo al antiguo Hospital Xeral. Seguirán así en un edificio del Sergas.

La junta de personal de los juzgados había solicitado a la Xunta y al arquitecto que el proyecto incluyese una zona exclusiva para el Instituto de Medicina Legal de Galicia. En ella se ubicarían los despachos de los forenses y varias salas de autopsias. Actualmente están desperdigadas y se ubican principalmente en el Hospital Nicolás Peña, «que no reúne las condiciones óptimas», según Xosé Barreiro, presidente de la junta. También hay una que está perfectamente acondicionada en el tanatorio Vigomemorial, donde se llevan los casos de autopsias complicadas. Pero la mayoría se efectúan en el Nicolás Peña.

La Xunta prefiere que los medios sanitarios sigan ubicados en las dependencias del Sergas, de manera que la sala de autopsias se ubicará junto a la Cidade da Xustiza pero no dentro de ella.

Otra de las peticiones que salió ayer a relucir en la comisión de seguimiento fue la necesidad de contar con una guardería para los hijos de los funcionarios. Será una instalación similar a las que ya disponen en otras dependencias de la Xunta. Sin embargo, de momento no se va a ejecutar tampoco esta guardería, aunque se reserva una lugar para ella, según manifestó el teniente de alcalde y concejal de Fomento, David Regades, al término de la comisión. Regades se ha congratuló de la buena colaboración existente entre Xunta y Concello y señaló que no es nueva la cooperación entre administraciones.

Párking

El arquitecto Alfonso Penela confirmó que los trabajos se harán de una manera concienzuda, tapando la obra de manera que se levante el menor polvo posible. Solamente se verá el resultado al final cuando quede libre la plaza bajo la cual se construirá un aparcamiento para los funcionarios y trabajadores con capacidad para 400 plazas.

Xosé Barreiro asegura que los trabajadores preferían que el «párking se ubicase en la calle Vázquez Varela de manera que su uso fuese público y privado».

Respecto a los viejos edificios de la calle Lalín, el vicepresidente Alfonso Rueda admitió que todavía no saben qué van a hacer con ellos. «Tenemos dos años para pensarlo», dijo Rueda.