Una familia de Vigo con niños al borde del desahucio por impago del alquiler

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.Moralejo

Deben 2.500 euros a la empresa propietaria de Madrid que los ha denunciado

17 abr 2017 . Actualizado a las 11:35 h.

Una familia de Vigo podría verse en la calle en poco más de un mes al carecer de recursos para afrontar el alquiler del piso de Travesía donde viven desde hace dos años. La propietaria del inmueble es una empresa de Madrid que ha presentado una denuncia y el juicio se celebrará hoy por la mañana en el juzgado de primera instancia numero 14 de Vigo.

Juan Fernández Durillo y Cristina Gabarre Suárez, de 37 y 38 años, reciben el apoyo de la Federación Vecinal Eduardo Chao, que ha convocado para hoy una concentración en la puerta de los juzgados para reclamar al Concello que firme el convenio en materia de vivienda que tiene la Xunta elaborado. Lo consideran imprescindible para evitar estas situaciones.

Juan explica que ha trabajado durante toda su vida en el puerto y como obrero de la construcción. Una de las empresas en las que estuvo contratado le pagó los estudios para poder sacarse un título de encofrador. El año pasado se quedó sin empleo y durante un tiempo estuvo cobrando la Risga hasta que se la retiraron por un despiste a la hora de acudir a las citas porque le había salido un trabajo de dos horas diarias. Mientras tenía unos ingresos fijos periódicos pudo afrontar religiosamente el pago de sus obligaciones. Ahora llevan seis meses sin poder pagar el alquiler de 300 euros. La deuda total que se les reclama es de 2.500 euros. Si finalmente son condenados a dejar el piso, el lanzamiento se producirá el próximo 25 de mayo a las nueve de la mañana.

Menores

Podrían verse en la calle con tres hijos menores: una niña de 12 años con una minusvalía psíquica y un niño de 10 y otro de 15. Los pequeños se encuentran bajo la tutela de la Xunta en un centro de día y van a dormir a su casa. Los progenitores lamentan que no pueden disfrutar de ellos todo el tiempo que desean. «A veces se marchan a las dos y los traen a las ocho. Son muchas horas sin ellos y los echamos en falta», asegura la madre.

Juan ha buscado trabajo en todas partes para salir de la situación límite en la que se encuentran. «He echado el currículo en todas las obras que se están haciendo en Vigo», afirma. «Quiero un trabajo, no deseo estar en casa cobrando la Risga sin hacer nada», asegura.

La Federación Vecinal comenzará a proporcionarles ayuda alimentaria. Responsables del departamento de atención social de esta entidad constataron el sábado que no había ni un solo alimento en la vivienda. Horas más tarde, el hombre pudo vender algo de chatarra y comprar una tira de churrasco, un pollo y dos paquetes de espaguetis. Su mujer tiene una dolencia física crónica y no pude trabajar. Solo lo hizo una vez en la vendimia. La federación de vecinos intentará ayudarla para que cobre una pensión no contributiva en vista de su estado de salud.

«El futuro lo veo muy mal, el mundo se me cae abajo. Siento que necesito apoyo y que nadie me ayuda», lamentaba ayer esta mujer. La federación vecinal ha pedido al abogado de oficio que alegue en el juicio de hoy el protocolo de la Xunta y la administración de justicia para paralizar todos los desahucios a familias con vulnerabilidad económica hasta que la administración no les consiga una alternativa habitacional.

La federación de vecinos le pagó la renovación del DNI para que pueda asistir hoy al juicio

La Federación de Vecinos Eduardo Chao conoce desde hace unos días el caso de esta familia y lo primero que ha hecho ha sido pagar la renovación del DNI de Juan para que pueda asistir al juicio previsto para hoy lunes y defenderse. Sin poder acreditar su identidad no podría haber comparecido en la sala de vistas. Juan reconoce que él ni siquiera tiene dinero para afrontar este gasto porque tiene otras prioridades que atender. «Si consigo diez euros son para comer», manifestaba ayer. La entidad vecinal tomó esta decisión después de haber intentado sin éxito comunicarse con el departamento municipal de Bienestar Social el pasado viernes por la mañana para que buscaran una solución. Una portavoz manifestaba ayer que en el Concello debería existir un protocolo especial para atender este tipo de necesidades puntuales de personas sin recursos que necesitan realizar algún ingreso para cumplimentar algún trámite ante la administración.

Estos vigueses han pedido la tarjeta de alimentos y hace dos meses la ayuda de emergencia social. Más recientemente también han solicitado la reanudación de la prestación de la Risga para poder volver a contar con unos ingresos que les permitan poder garantizarse las necesidades más básicas.

Una de las cuestiones que la federación de vecinos considera necesario para este y otros casos similares es que exista en Vigo un plan de vivienda, con el fin de que, en caso de asignarles una vivienda, sea dentro del término municipal y no lejos para que puedan seguir desarrollando su vida normalidad y evitar desplazamientos.