Crean una aplicación que avisa a los padres al instante si su hijo sufre acoso

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Otro proyecto universitario seleccionado por Telefónica almacena energía para las casas aisladas

11 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Un padre podrá saber al momento si su hijo es objeto de acoso escolar gracias al proyecto que desarrollan Diego Enrique Fontán y Ahmed Anadi, estudiantes de Telecomunicación y Minas, respectivamente, en la Universidad de Vigo.

Social Defender es el nombre de un nuevo sistema de monitorización en tiempo real para detectar y prevenir el acoso escolar a través de las redes. La idea es que este programa sea una herramienta en los móviles de los padres, profesores o tutores para que reciban las notificaciones en caso de que se produzca ese acoso. «Por ejemplo, si un compañero de clase insulta al niño, el padre recibe el aviso», comenta Fontán. La aplicación también puede servir en otros casos, como el acoso a mujeres a través de las redes, o como apoyo para las investigaciones de las fuerzas de seguridad, muy eficaz al ser tan inmediato el resultado. De momento el prototipo se hace para Twitter, pero la idea es extenderlo a otras redes como Facebook.

«Le pones el programa, el nombre del niño y apodos, si los tiene, y si alguna persona pone un tuit o una foto en los que aparezcan insultos o frases ofensivas, avisa al momento en el móvil. El padre no tiene por qué tener Twitter ni hace falta que sepa la contraseña de su hijo. A él no le aparece nada, se lo dice solo al tutor que tiene la aplicación», explica el universitario.

La iniciativa ha sido una de las seleccionadas por la Fundación Telefónica para formar parte del programa Think Big, dirigido a aumentar las oportunidades laborales de jóvenes de entre 15 y 30 años. También ha resultado elegido el proyecto Comprimir para vivir. Se trata de un sistema que genera y almacena energía en forma de aire comprimido. El objetivo es sustituir las tradicionales baterías, mucho más contaminantes y perecederas.

Una de sus utilidades es la de erigirse como alternativa para facilitar energía a las casas con difícil acceso a las que no llegan las redes eléctricas tradicionales.

Entre sus ventajas figura el hecho de tratarse de energía limpia, autónoma, sostenible y de alta durabilidad. Otra de las ventajas que ofrece es que solo sería necesaria una inversión inicial en el aparato, aunque de momento no se ha fijado su coste. El mantenimiento sería escaso

«Si tienes una batería tienes una vida útil limitada, hay que cambiarla y deshacerse de ella, que es un problema», comenta Ignacio Moreno de Sousa, uno de los autores del proyecto junto con Cristina Antelo, Adrián Fernández, Daniel Ferreiro, Brais Ortíz, Iria Paisán y Patricia Suárez. Todos ellos son estudiantes de Ingeniería Industrial y cuentan con la colaboración del profesor José Luis González.